La Asociación de Municipios Ribereños ha expresado su descontento ante la autorización de un nuevo trasvase de agua para regadío. Según la Comisión Central del Acueducto Tajo-Segura, se ha autorizado el trasvase de 15 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura durante el mes de agosto. Sin embargo, la asociación argumenta que en el Levante «hay agua de sobra».
En un comunicado, los ribereños sostienen que en el Levante existen alrededor de 170 y 180 hectómetros cúbicos de agua disponibles en el sistema del trasvase, provenientes del Tajo, pozos y desalación. Por lo tanto, consideran que no es necesario añadir un solo hectómetro cúbico más.
Los ribereños lamentan que se esté desembalsando menos agua hacia el Tajo para mantener los embalses en nivel 3 y evitar el cierre del trasvase. Aunque agradecen una reducción de 5 hectómetros cúbicos en comparación al máximo trasvasable, lo consideran insuficiente dadas las reservas disponibles en el Levante.
Además, señalan los «continuos varapalos judiciales» que los defensores del trasvase han recibido. El Tribunal Supremo ha respaldado una y otra vez los recortes en virtud de la protección del Tajo. Según el nuevo presidente de la Asociación de Municipios Ribereños, Borja Castro, no se puede seguir pidiendo esfuerzos y comprensión cuando el Ministerio es consciente de la excesiva demanda de agua por parte de la agroindustria, lo que también ocurre en otras partes de España.
Los ribereños exigen «firmeza» a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, y le instan a cumplir con lo que saben que es correcto, sin sucumbir a la tibieza política tradicional que evita enfrentarse a los poderosos agentes de la agroindustria.
Por último, exigen la modificación inmediata de las Reglas de Explotación, ya que consideran que el plazo de doce meses no responde a las necesidades políticas y la protección del medio ambiente debe ser una prioridad.
