En un esfuerzo por abordar el desafío constante de la despoblación en áreas rurales, representantes de la Comunidad Intermunicipal (CIM) de Cávado en Portugal se han puesto en contacto con responsables de Castilla-La Mancha para conocer las iniciativas que la región española ha puesto en marcha. La CIM de Cávado, que se encarga del desarrollo territorial y agrupa a varios municipios del norte de Portugal, ha mostrado un creciente interés en la metodología española para contrarrestar la pérdida demográfica rural.
En una reunión online, Jesús Alique, comisionado del Reto Demográfico de Castilla-La Mancha, compartió detalles de las políticas aplicadas por su Gobierno con Rafael Amorim, secretario ejecutivo de la CIM de Cávado, y Marinha Isabel Esteves, técnica de la Unidad de Planeamiento Territorial. El Gobierno regional confirmó la celebración del encuentro, con un enfoque especial en cómo se están abordando los problemas de despoblación en la región castellanomanchega.
Cuatro de los municipios bajo la jurisdicción de la CIM de Cávado se enfrentan actualmente a la problemática de la despoblación. La región busca inspiración en la Ley de Despoblación de Castilla-La Mancha y en las más de 200 acciones que componen su Estrategia Regional frente a la Despoblación. Alique destacó particularmente las medidas fiscales diferenciadas como las más innovadoras, las cuales han tenido un efecto notable en la retención y el aumento de población en las localidades afectadas.
El comisionado explicó que, desde la entrada en vigor de la ley en 2021, se ha logrado un crecimiento demográfico de 3.600 personas en las zonas afectadas por la despoblación. Añadió que la garantía de acceso a servicios públicos básicos, como la educación y la salud, ha sido un factor clave en estos resultados positivos.
Mirando hacia el futuro, Alique también comentó sobre la creación de las Agendas de Desarrollo Urbano y Rural (ADUR), que se implementarán como experiencias piloto en cinco zonas despobladas, a partir de 2024, con el objetivo de analizar y mejorar específicamente las condiciones de cada región.
Cabe destacar que la CIM de Cávado administra una región diversa, con una superficie de 1.246 kilómetros cuadrados y una población de aproximadamente 416.652 personas en 2021, incluyendo áreas tanto rurales como urbanas, como el importante centro urbano de Braga. El intercambio de experiencias y políticas entre las regiones de Castilla-La Mancha y Cávado puede proveer un marco valioso para la lucha contra la despoblación en zonas rurales y representa un ejemplo de cooperación transnacional en materia de desarrollo regional.
