En un extraordinario giro de eventos, una mujer fue arrestada el pasado viernes, acusada de un audaz intento de estafar millones y robar la participación de la icónica familia de Elvis Presley en Graceland. La legendaria mansión en Memphis, hogar del difunto rey del rock, se encontró en medio de una conspiración que podría haber alterado su destino para siempre.
Según las autoridades, la mujer detrás de esta complicada red de engaños es una ciudadana de 53 años que ahora enfrenta serios cargos federales. Las acusaciones indican que urdió un esquema para realizar una venta fraudulenta de Graceland, haciendo creer que Lisa Marie Presley, la hija del famoso cantante, había utilizado el histórico inmueble como garantía de un préstamo que no se liquidó antes de su fallecimiento. Nicole M. Argentieri, una alta funcionaria del Departamento de Justicia de Estados Unidos, ha sido una de las voces que ha expuesto públicamente los detalles del caso.
La presunta estafadora no solo habría creado una abundancia de documentos falsos para dar credibilidad a su historia, sino que también intentó extorsionar a la familia Presley para forzar un arreglo. Afirmó representar a tres personas distintas, vinculadas a un inexistente prestamista privado, sosteniendo que Lisa Marie Presley había adquirido un préstamo de 3.8 millones de dólares en 2018, poniendo como garantía la propiedad de Graceland, y que posteriormente no habría cumplido con el pago.
Para solucionar el presunto impago, la acusada exigió 2.85 millones de dólares a la familia, presentando documentos de préstamo con las firmas falsificadas de Lisa Marie Presley y de un notario público de Florida. Además, se atrevió a publicar un aviso fraudulento de ejecución hipotecaria en un diario de Memphis, anunciando la subasta de Graceland al mejor postor en mayo pasado, añadiendo un nivel más de audacia a su intento de estafa.
Este intento de venta fue detenido por un juez de Tennessee tras identificar que causaría un daño irreparable a Danielle Riley Keough, nieta de Elvis, que había interpuesto una demanda para bloquear la venta. La propiedad, uno de los mayores atractivos turísticos del sur de Estados Unidos, ha alcanzado un valor de cientos de millones de dólares, posicionándose incluso como la segunda casa más visitada del país después de la Casa Blanca.
Graceland, ahora firmemente en manos de la familia Presley, sigue siendo un monumento al legado de Elvis Presley y un punto de interés para fans de todo el mundo. La impactante revelación de este intento de fraude subraya la importancia de dicha herencia y el continuo afecto y admiración hacia Elvis Presley, cuya música y legado continúan inspirando a generaciones.