Nuevo Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha: Un paso hacia el blindaje social y el consenso
El secretario de Análisis y Estudios Estratégicos del PSOE en Castilla-La Mancha, Fernando Mora, ha celebrado el reciente avance en el blindaje del Estado del Bienestar, la igualdad de género y los derechos fundamentales en el nuevo Estatuto de Autonomía de la región. Destacó que la discusión en el Congreso de los Diputados evidencia que es posible alcanzar acuerdos y consensos en esta comunidad.
Mora subrayó que el consenso será crucial para futuras reformas del Estatuto, que ya no se podrán realizar solo con mayorías absolutas. Esta nueva dinámica es esencial para proteger áreas vitales como la educación, la sanidad y los servicios sociales.
El Estatuto también aborda temas cruciales como la integración en la Unión Europea, las energías renovables, la igualdad en la prestación de servicios y, por ende, una financiación adecuada. Además, se incluyen el desarrollo rural, la despoblación, la inteligencia artificial, la protección de datos y el derecho al agua.
Mora felicitó la aceptación de la iniciativa por parte del Congreso con apoyo mayoritario, con la única oposición de Vox. Expresó que este es un camino importante para transformar la sociedad castellanomanchega y reflexionar sobre el impacto del actual Estatuto en el desarrollo regional.
Presupuestos y el estancamiento de la oposición
En cuanto a los presupuestos de 2026, Mora criticó la enmienda a la totalidad presentada por el PP regional, calificando de excesivas las enmiendas repetitivas durante diez años. Señaló que tanto PP como Vox deben aprender a realizar una oposición constructiva, necesaria para avanzar en la sociedad.
Mora argumentó que estas enmiendas no contribuyen al consenso presupuestario. Además, instó al PP a resolver sus problemas internos para mantener su credibilidad ante los ciudadanos, enfatizando que el líder regional, el señor Núñez, debería centrarse en solucionar sus conflictos internos.
Este paso en el Estatuto de Castilla-La Mancha no solo refuerza los derechos sociales, sino que también establece un precedente en la política del consenso, vital para su desarrollo futuro.
