Loreto Molina, la concejal de Obras y Servicios de Toledo, ha mantenido una reunión con representantes del comité de empresa de Valoriza, la empresa encargada de la limpieza y recogida de residuos en la ciudad, tras el anuncio de una huelga indefinida que comenzaría el próximo 27 de mayo, coincidiendo con las festividades del Corpus. La concejal ha escuchado las demandas del comité en un intento por propiciar un acuerdo que evite paralizar el servicio durante una época del año tan señalada para la localidad.
A pesar de que el Ayuntamiento no tiene capacidad para intervenir directamente en el conflicto laboral, Molina ha expresado el interés del gobierno municipal en que las partes involucradas alcancen una resolución satisfactoria con la mayor brevedad. Según ha manifestado la concejal, una huelga en estas fechas no solo sería perjudicial para el entorno urbano, sino que también afectaría negativamente a la reputación de Toledo, ciudad considerada Patrimonio de la Humanidad, y que durante el Corpus recibe a miles de visitantes.
El gobierno local ha subrayado que se trata de un servicio que ha sido externalizado y que el problema surge de una relación contractual entre Valoriza y sus empleados. Este conflicto se origina de un contrato otorgado a la concesionaria Valoriza en abril de 2023, justo un mes antes de los comicios municipales y tras ocho años de prórrogas sucesivas.
La huelga anunciada genera preocupación en el ayuntamiento debido a la importancia cultural y económica del evento del Corpus Christi. No obstante, la solución del conflicto laboral está en manos de la empresa y sus trabajadores, con la esperanza de que puedan llegar a un acuerdo que permita el normal desarrollo de las celebraciones y mantenga la limpieza y buena imagen de la ciudad en un momento tan crucial para Toledo y sus ciudadanos.
