La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha salido en defensa del acuerdo logrado entre el PSC y ERC, el cual ha posibilitado la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña. Redondo ha subrayado la importancia de este pacto para avanzar en la resolución del «conflicto territorial», proponiendo un desenlace favorable tanto para España como para Cataluña. La ministra ha respondido a las críticas de Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, instándolo a mostrar más seriedad y responsabilidad en política.
La representante vallisoletana ha enfatizado que no ha habido un cambio de postura gubernamental con respecto al acuerdo sobre el concierto fiscal para Cataluña. Señala que dicho acuerdo es solo el comienzo de un proceso que debe culminar con la aprobación de una ley en el Congreso de los Diputados, lo cual actuará como garantía a través del procedimiento legislativo, asegurando debates públicos, políticos y sociales.
Con objetivos claros, Redondo remarca que se busca superar la crisis territorial en Cataluña, un esfuerzo que se ha impulsado desde la administración de Pedro Sánchez desde su inicio. La crisis, a juicio de la ministra, alcanzó su punto más álgido en 2017 con momentos de gran tensión. Desde entonces, se ha trabajado para lograr una normalización y convivencia.
Resaltando los logros económicos de España en comparación con países vecinos, Redondo alaba la recuperación económica tras pandemias y crisis, y diferencia los resultados obtenidos bajo el modelo socialista del modelo del Partido Popular (PP). Argumenta que el acuerdo no atenta contra los principios de igualdad y solidaridad que dicta la Constitución y añade que se está trabajando para que Cataluña sea un territorio donde la tranquilidad se vea reflejada como en el resto de España.
Además, la ministra ha resaltado que el gobierno se empeña en resolver el problema territorial en Cataluña y apunta que Salvador Illa será un presidente que favorecerá este proceso de normalización y que con el PP no se hubiera alcanzado tal aproximación al conflicto.
Con respeto a las palabras de García-Page, Redondo se alinea con las declaraciones de Pedro Sánchez, asegurando que lo sorprendente sería escuchar declaraciones de otra índole. Critica el rechazo al acuerdo sin un conocimiento previo del texto, y recalca la importancia de la solidaridad como una «línea roja» para el ejecutivo, aludiendo al artículo 149.1 de la Constitución, en el cual se garantiza la igualdad de derechos y oportunidades a todos los españoles, independientemente de su región. Finaliza diciendo que este principio es defendido tanto por la Constitución como por el gobierno de Sánchez y el acuerdo alcanzado.
