La vigésima edición de las Miniolimpiadas con la participación de mil quinientos alumnos de diecisiete colegios de Puertollano (Ciudad Real) se realizarán la próxima semana. Este evento deportivo es una de las principales referencias del deporte escolar de Castilla-La Mancha, en una actividad coordinada por el Patronato Municipal y Dxt Base y patrocinada por Repsol.
Miniolimpiadas Escolares en Puertollano
Las Miniolimpiadas se constituyen en una prueba deportiva, que es la envidia de toda la provincia y la región. Así lo destacó el concejal de deportes, Jesús Caballero, y “lo dicen la cantidad de pueblos y ciudades que nos llaman anualmente para decirnos cómo lo hacemos”.
Unas miniolimpiadas que forman parte de la programación anual de los centros educativos, que se han convertido en una tradición y que engloban valores del deporte de compañerismo, competición, juego limpio, saber ganar y saber perder, esfuerzo, socializarse con otros colegios, conocer a otros niños, indicó Caballero, que agradeció el trabajo realizado por los equipos directivos de los colegios y al profesorado de educación física.
De atletismo a shuttleball
Las miniolimpiadas que se abrirán el lunes 16 de mayo con un desfile desde la Concha de la Música hasta el estadio Sánchez Menor y el pabellón Antonio Rivilla para el inicio de las pruebas de atletismo.
En los siguientes días competirán en el juego de raqueta de shuttleball, fútbol sala femenino, fútbol 8, baloncesto, balonmano y las grandes finales de deportes colectivos se jugarán el viernes 20 de mayo, ha detallado Alex Tena de Dxt Base.
Veinte años de andadura
Unas miniolimpiadas que cumplen veinte años de andadura y que nacieron de la iniciativa de un grupo de profesores junto al técnico de deportes, Manuel Serrano, que como relata Agapito Coronel, se propusieron aglutinar toda la actividad deportiva de los colegios para hacerlo más participativo en horario lectivo.
“Empezamos a dedicar tres días lectivos y poco a poco con la buena voluntad de todos del área de deportes, los maestros de educación física, los claustros de profesores se fue fraguando hasta institucionalizarse”.
Unas miniolimpiadas que veinte años después generan ilusión por parte del alumnado y una motivación añadida a las clases de educación física, señala Coronel.