Los beneficios millonarios generados por Lactalis Nestlé no han tenido impacto en las mesas de negociación del nuevo convenio colectivo para la planta de Marchamalo, ubicada en Guadalajara. Esta instalación, la más grande del grupo lácteo en España, cuenta con una fuerza laboral de más de 600 personas, de las cuales 545 forman parte de la plantilla propia.
Tras cinco meses de intensas negociaciones, las partes involucradas no han alcanzado un acuerdo cercano. Las ofertas propuestas por la empresa no han satisfecho las expectativas de los trabajadores, quienes buscan unas condiciones laborales que reflejen los éxitos económicos de la compañía.
El distanciamiento en las posturas persiste, a pesar de los esfuerzos por llegar a un consenso. La falta de progreso se traduce en una creciente incertidumbre entre los empleados, que esperan que los beneficios del grupo se vean reflejados en mejoras tangibles en sus condiciones laborales.
La situación actual plantea un desafío significativo para ambas partes, que deberán seguir trabajando para encontrar una solución que satisfaga tanto a los trabajadores como a la empresa.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha