El próximo domingo, 28 de enero, el Partido Popular de Castilla-La Mancha ha organizado el desplazamiento de unos 1.000 castellano-manchegos a Madrid para unirse a la concentración convocada por su partido a nivel nacional. La manifestación se produce como respuesta a las acciones de Junts per Catalunya, que según la formación política, está ejerciendo «extorsión» sobre el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez.
Paco Núñez, presidente del PP en Castilla-La Mancha, anunció el desplazamiento masivo después de un encuentro con dirigentes del partido en Ciudad Real. Núñez expresó su descontento al afirmar que la concentración busca «impedir que el dinero de Castilla-La Mancha se vaya a Cataluña» y criticó al presidente de la comunidad autónoma, Emiliano García-Page, por «posibilitar» las maniobras de Sánchez con los acuerdos alcanzados entre el PSOE y partidos independentistas a nivel nacional.
En palabras de Núñez, las negociaciones del PSOE ponen en peligro las inversiones y necesidades vitales de Castilla-La Mancha, y acusó al partido en el poder de utilizar el dinero de su comunidad para sustentar su posición en la Moncloa. El líder del PP castellano-manchego adelantó que su partido continuará defendiendo los intereses e igualdad de todos los ciudadanos españoles y en especial los castellano-manchegos, y se opone a lo que considera «el mayor ataque hacia nuestro sistema democrático», refiriéndose a una propuesta de ley de amnistía.
Además, Núñez criticó la postura del PSOE que, según él, en lugar de rectificar, ha agravado su posición en la convención celebrada en Galicia, donde se reafirmó el compromiso con Pedro Sánchez y su rumbo hacia la mencionada ley de amnistía. Esta, de acuerdo con el líder del PP en la región, conduce a la desigualdad entre los españoles.
Miguel Ángel Valverde, presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real y del PP en dicha provincia, quien estuvo presente junto a Núñez, también expresó su descontento. Él sostiene que el PSOE está redirigiendo inversiones a otras comunidades autónomas cuyos representantes políticos son clave para el Gobierno de Sánchez.
Para finalizar, Valverde manifestó preocupación por lo que él considera una «naturalización y normalización de la desigualdad» perpetrada por el PSOE y denunció a los dirigentes socialistas de Ciudad Real por respaldar plenamente la gestión de Pedro Sánchez al frente del Gobierno de España.