En un giro que marca el fin de una extensa búsqueda, Carlos Navarro, más conocido como ‘El Yoyas’ de su época en ‘Gran Hermano’, fue detenido tras casi dos años en la fuga, acusado de violencia de género contra su exmujer, Fayna Bethencourt. La captura tuvo lugar en Torre de Claramunt, Barcelona, en una operación que contó con la colaboración entre los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional, evidenciando la gravedad de los hechos que le imputan.
La justicia le sigue los pasos a Navarro luego de haber sido sentenciado a una pena de cinco años y ocho meses por malos tratos y lesiones hacia Bethencourt, con quien inició una relación tras coincidir en la segunda edición del ‘reality show’ más famoso de España, dejando como fruto a dos hijos. Su detención cierra un capítulo oscuro que ha mantenido en vilo tanto a la opinión pública como a los involucrados directos.
La reacción de Fayna no se hizo esperar, quien a través de sus redes sociales expresó su gratitud y alivio por el apoyo recibido durante este difícil período. Este agradecimiento se extendió a todos aquellos que le enviaron mensajes de fuerza y solidaridad, reflejando el alivio y la esperanza de cerrar este amargo capítulo de su vida y mirar hacia adelante por ella y sus hijos.
Este caso ha despertado la atención de diversas figuras públicas, incluida Mercedes Milá, quien no tardó en expresar su apoyo a Bethencourt. Conocida por su estrecha relación con los participantes del reality a lo largo de las ediciones que presentó, Milá subrayó la valentía y dignidad mostrada por Fayna ante las adversidades. Su gesto no solo enfatiza la solidaridad hacia la víctima sino que también pone de manifiesto la importancia de abordar y visualizar la gravedad de la violencia de género, un mal que sigue afligiendo a la sociedad contemporánea.
Este resonante caso reitera la necesidad imperante de mantener un compromiso firme y continuo en la lucha contra la violencia de género, asegurando la protección y el derecho de las víctimas a vivir libre de miedo y opresión. La captura de ‘El Yoyas’, más allá de simbolizar la justicia tardía para Bethencourt, sirve como un recordatorio crucial sobre la persistencia de estos delitos y la urgencia de abordarlos con la seriedad y atención que merecen.
