En la conmemoración del Día Nacional del Niño Desaparecido, que se celebra cada 25 de mayo, el presidente ha compartido un mensaje contundente sobre la realidad alarmante que enfrentan miles de menores que son reportados como desaparecidos en Estados Unidos. Esta crisis genera un dolor inmenso no solo en las familias afectadas, sino en toda la sociedad, que se ve impactada por la creciente preocupación por la seguridad de los niños.
En su intervención, el presidente enfatizó su compromiso de proteger a los más vulnerables y su decisión de luchar con todas las herramientas disponibles contra los depredadores, traficantes y secuestradores que buscan hacer daño a los jóvenes. La problemática, según sus declaraciones, ha sido exacerbada por las políticas de frontera de la administración anterior, lo que ha dado lugar a un aumento en el tráfico de menores.
El mandatario anunció con orgullo que su administración trabaja arduamente para sellar la frontera sur y restaurar la dignidad de toda vida humana, destacando que una de sus acciones prioritarias al asumir el cargo fue declarar una emergencia nacional en dicha frontera. Además, reiteró la designación de los carteles como organizaciones terroristas extranjeras, una medida que busca desmantelar sus operaciones criminales.
A medida que se implementan medidas para deportar a delincuentes inmigrantes y frenar el tráfico de niños, el presidente prometió que su administración redoblaría esfuerzos para localizar a los menores desaparecidos y reunificarlos con sus familias. Resaltó que bajo su liderazgo, se están restaurando la justicia y el orden en las comunidades, así como la paz en los hogares.
En este día significativo, se envían oraciones y pensamientos de apoyo a las familias que viven el angustiante proceso de búsqueda de un hijo desaparecido. La administración se ha comprometido a colaborar con las agencias de aplicación de la ley para asegurar que cada niño regrese sano y salvo a su hogar. El presidente cerró su mensaje reiterando su visión de construir un futuro en el que cada niño sea seguro, valorado y empoderado para llevar una vida plena llena de oportunidades.
Fuente: WhiteHouse.gov
