El Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo ha inaugurado este martes su nuevo sistema robótico ‘Lokomat infantil’, un aparato para el entrenamiento del movimiento en pacientes pediátricos con lesiones medulares donado al centro por la Fundación Aladina, que ya ha sido utilizado por más de 55 niños y que ha contado con el bicampeón del mundo de rallyes y tres veces ganador del Rally Dakar, Carlos Sainz, como embajador.
Sainz ha visitado el hospital junto al presidente de la Fundación Aladina, Paco Arango; la directora general de Humanización y Atención Sociosanitaria, Maite Martín; y la directora gerente del centro, Sagrario Azuela, donde ha conocido, entre otros pacientes pediátricos, a Valeria, una niña de siete años que ha asegurado que el ‘Lokomat infantil’ le gusta porque hace ejercicio y es divertido.
El piloto ha querido dar la enhorabuena a la Fundación Aladina y a todos los miembros del hospital por el trabajo «tan espectacular» que realizan, considerando que este es «un día de enhorabuena para todos».
Sainz ha destacado que esta máquina es «de alta tecnología» y que sirve para «ayudar enormemente a la rehabilitación» de los pacientes pediátricos del hospital, deseando que tanto la Fundación Aladina como las instituciones continúen «buscando esas nuevas tecnologías para ayudar a los niños y a todo el mundo».
Por su parte, el presidente de la Fundación Aladina, Paco Arango, ha explicado que la inauguración del ‘Lokomat infantil’ llega ahora después de la pandemia pero ya ha contado con más de 55 pacientes.
Arango ha comentado que la Fundación Aladina está involucrada con los niños con cáncer pero ha explicado que muchos de los pacientes del Hospital Nacional de Parapléjicos son oncológicos.
El presidente de la Fundación Aladina ha calificado este sistema de «maravilloso» y ha aprovechado para anunciar que la Fundación se involucrará para poder conseguir un nuevo exoesqueleto para el Hospital Nacional de Parapléjicos.
Mientras, la directora general de Humanización y Atención Sociosanitaria, Maite Martín, ha destacado la colaboración «fructífera» que están llevando a cabo el Gobierno regional y la Fundación Aladina, que se plasmó el año pasado en un convenio que va a dar cabida a «multitud» de iniciativas en todas las gerencias de la sanidad castellanomanchega.
En este punto, ha detallado que en este momento están en marcha dos proyectos «muy importantes» en colaboración con la Fundación Aladina como son la decoración de todas las salas de Pediatría del Hospital Universitario de Toledo y otro, que se está fraguando en este momento, para conseguir becas de formación para oncólogos pediátricos en el hospital de Albacete.
Además, ha comentado que aunque se suele asociar la lesión medular con los accidentes, más del 40 por ciento de los niños que han sido pacientes del Hospital Nacional de Parapléjicos durante el año pasado tenían su origen en un proceso oncológico, por lo que ha manifestado que la llegada del ‘Lokomat infantil’ al centro supone «un búsqueda de sinergias total».
UN SISTEMA DE CIENCIA BÁSICA
Finalmente, la doctora Elisa López Dolado, una de las médicas de la unidad de Rehabilitación Pediátrica del Hospital Nacional de Parapléjicos, ha detallado que el ‘Lokomat infantil’ es un sistema que pretende que los pacientes puedan «caminar en la calle», aunque ha reconocido que hay que ponerse objetivos «humildes» en función de cada caso concreto.
López Dolado ha señalado que este sistema se basa en una serie «muy robusta» de ciencia básica para tratar de atajar la desconexión entre los circuitos automáticos que se guardan en la médula y los circuitos cerebrales, que es una de las causas que altera la movilidad de los pacientes medulares.
Así, la médica ha comentado que el ‘Lokomat infantil’ está compuesto de tres partes: un arnés que soporta la carga corporal del paciente, un tapiz rodante y unas ortesis que se mueven, por lo que la suma de los tres componentes genera un patrón de marcha normalizado.