Carlos Mazón, ‘president’ de la Generalitat y líder del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV), ha hecho un llamamiento al Ejecutivo central para superar los «fanatismos hidrológicos» y entablar un diálogo con las comunidades autónomas en torno a la gestión del agua. Durante una comparecencia ante los medios tras un desayuno informativo celebrado en Madrid, Mazón ha señalado que la actitud de Castilla-La Mancha carece de solidaridad, en referencia a las recientes declaraciones del gobierno regional que criticaban la gestión del agua por parte de los agricultores valencianos, acusándolos de regar «por encima de sus posibilidades».
Mazón ha rechazado estas acusaciones, defendiendo que los campos de golf en la Comunidad Valenciana se riegan con agua reciclada y depurada, y ha pedido que se detenga la «demagogia» y los ataques no fundamentados dirigidos a su comunidad, subrayando la gravedad del asunto hidrológico. Según él, la postura de Castilla-La Mancha no ha sido solidaria desde hace tiempo y ha criticado la «especie de cueva ideológica» en la que se encontraría el gobierno de Emiliano García-Page.
El ‘president’ valenciano ha insistido en la necesidad de un enfoque riguroso en la gestión del agua y ha citado como ejemplo a Francia, país que, a su parecer, ha resuelto la distribución del recurso hídrico conectando todas sus cuencas mediante lo que denomina «autopistas del agua». Insistió en que el agua «no es de quien más cerca pasa», planteando la cuestión de por qué el río Tajo aporta el doble de agua a Portugal de lo que este país solicita, mientras que a comunidades como Alicante, Murcia y Almería se les niega lo que según los técnicos necesitan.
Mazón también ha comentado sobre la ausencia de referencia al trasvase Tajo-Segura en la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la desaladora de Torrevieja en Alicante, mostrando su asombro ante la omisión de este tema clave para la región.
El próximo lunes, Mazón tiene prevista una reunión con la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la que abordará las preocupaciones de los agricultores y defenderá la postura de la Generalitat en materia de agua. Aunque espera una posición complicada por parte de la ministra, se muestra confiado en que las propuestas del Consell son razonables y van encaminadas a la búsqueda de soluciones sostenibles y factibles para distribuir el recurso hídrico de forma equitativa y eficiente en toda España.