En un emocionante episodio, Ramón se despide de MasterChef tras fallar en el desafío de las batallas culinarias, siendo el tercer eliminado de la temporada. La competencia se intensificó en su tercer capítulo, no solo por la presencia de ingredientes inusuales sino también por la participación especial de Loreto, ganadora del MasterChef Junior 10. Ramón, quien no logró convencer al jurado con su tarta de Santiago, se convirtió en una partida emocional tanto para sus compañeros como para la audiencia, subrayando la imprevisibilidad y exigencia del concurso.
Por otro lado, Samya se destacó al alzarse con el delantal de la segunda oportunidad, una novedad en esta edición de MasterChef que le ofrece una segunda vida en el concurso. Este premio, que debe mantener en secreto para evitar su descalificación, destaca no solo la destreza culinaria de Samya sino también su habilidad estratégica, al tener que gestionar la información de su ventaja sin compartirla con el resto de los competidores.
Adicionalmente, el episodio incluyó un conmovedor homenaje a las víctimas del 11-M realizado en el parque de El Retiro, con la presencia de Pepa Muñoz quien inspiró a los concursantes con su pasión por la cocina y compromiso social. Este desafío probó no solo las habilidades culinarias de los participantes sino también su capacidad de manejar la presión emocional. La edición de este año de MasterChef se caracteriza por la intensidad, emociones y sorpresas que mantienen cautiva la atención del público.
