El concejal de Servicios Sociales, Javier Mateo, y el director del Festival de Cine Social (FECISO) de Castilla-La Mancha, Tito Cañada, han hecho balance este martes en el Ayuntamiento de Toledo de la XV edición de este certamen itinerante que han disfrutado entre 3.000 y 3.500 personas en Toledo del 18 al 28 de octubre y que pasará en noviembre por Torrijos (Toledo) del 7 al 11, y por Cuenca del 28 al 30.
Mateo y Cañada han destacado la participación de más de 15 países, siete centros educativos y un millar de escolares en este ciclo y su director ha expresado su voluntad de “extender” la iniciativa y “tejer redes” más allá de la región. Sobre ello, ha expresado que se trata de cuestiones que están claras pero que tendrán que ir materializándose con el tiempo.
El edil de Servicios Sociales ha dicho que FECISO supone “una referencia” para quienes conciben el cine como “una forma de contar verdades conmovedoras que nos movilicen” y ha dicho que la gala del pasado sábado fue “el punto final perfecto” pues recogió “el espíritu crítico y de denuncia, la apuesta por las minorías y el reflejo de nuestra sociedad”.
Además, Mateo ha comprometido “mantener o mejorar” la aportación económica del Consistorio de cara a futuras ediciones al entender que “las políticas sociales van más allá y pasan por movilizar y sensibilizar” a la ciudadanía.
Preguntado sobre este asunto, el edil ha recordado que el actual equipo de Gobierno incrementó la dotación presupuestaria a este festival en 2.000 euros, pasando de 6.000 a 8.000 euros, además de incrementar la cesión de espacios, con un total de cuatro, y mantener la promoción y difusión del evento. “Es nuestra obligación”, ha mantenido, valorando que la incorporación de más espacios al certamen ha permitido extender la propuesta en la capital.
Por su parte, Tito Cañada ha definido la esencia del festival como “el lugar en el que hablamos de la condición humana y contribuimos a derribar barreras y encontrarnos con personas, pues se trata de mostrar la vida en la que estamos inmersos”.
Sobre ello, ha recordado que temáticas tan dispares como la identidad transgénero, los refugiados, la inmigración, la violencia machista o la explotación de personas fueron algunos de los ejes que protagonizaron la XV edición del certamen.
Inteligencia afectiva
Cañada ha apostado también por el uso de la tecnología para el desarrollo humano a través de la pedagogía que se aplica en los centros docentes y sobre ello ha expresado la necesidad de trabajar sobre la inteligencia afectiva, emocional e inclusiva del ser humano en las escuelas.
Se trata, ha añadido, de “la parte más humanística de la educación y la estamos olvidando un poquito”. El director de FECISO ha adelantado que por este motivo próximamente habrá un encuentro que aglutinará a profesorado de la región para abordar la importancia del empleo de las técnicas audiovisuales en el cine.