En el marco del proyecto de la receta interoperable, Castilla-La Mancha ha extendido más de 627.000 recetas a ciudadanos de otras comunidades autónomas. Esta iniciativa de la receta interoperable tiene como objetivo, brindar a los pacientes la posibilidad de obtener sus medicamentos prescritos en cualquier farmacia del país, independientemente de dónde haya sido receta y sin necesidad de presentar su receta médica.
Castilla-La Mancha se incorporó a este proyecto de receta interoperable, en julio de 2017 y desde entonces se han ido sumando de forma progresiva las demás comunidades autónomas, hasta el pasado marzo del 2019 cuando se incorporó la Comunidad de Madrid. Como ya hemos mencionado, la receta interoperable supone una gran ventaja para los pacientes en lo que se refiere a la accesibilidad y la comodidad, y la misma ha reducido de forma significativa la carga administrativa de los profesionales de la Atención Primaria. Esto debido a que dichos profesionales al no tener que dedicar parte de su tiempo de consulta a la prescripción de recetas, pueden organizar mejor sus agendas y ofrecer una atención más completa a los pacientes.
Más de 169.000 ciudadanos se han beneficiado de esta receta interoperable. De acuerdo con su procedencia, son los ciudadanos de la Comunidad Valenciana los que han retirado un número más elevado de recetas, más de 251.000 medicamentos, seguida de la Comunidad de Madrid, con más de 180.000 recetas retiradas y Cataluña, con más de 50.000. Donde más dispensaciones se han realizado en el período de dos años en Castilla-La Mancha, ha sido en las oficinas de farmacia de la provincia de Cuenca, con un ttotal de 176.485; seguidas de Toledo, con 171.620; Albacete, con 120.373; Ciudad Real, con 83.728, y Guadalajara, con 75.290 dispensaciones.
Dentro de esta iniciativa de la receta interoperable, los ciudadanos con tarjeta sanitaria del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) han retirado 322.965 recetas electrónicas en las oficinas de farmacia de toda España, desde junio de 2016, cuando la Comunidad Autónoma obtuvo la certificación para realizar interoperabilidad en receta electrónica con otras autonomías. Este programa ha beneficiado en estos tres años, a más de 95.000 ciudadanos de Castilla-La Mancha con tarjeta sanitaria del SESCAM. Estos pacientes no han tenido que preocuparse en sus viajes por las fechas de dispensación en las que tienen que retirar su medicación de su oficina de farmacia de referencia o sin tener que acudir a su médico para que les realice anticipos de las mismas.
Según los datos que han sido recogidos en los sistemas de información del proyecto de receta interoperable, las oficinas de farmacia que más recetas procedentes de Castilla-La Mancha han dispensado son las de la Comunidad Valenciana, con un total de 139.693, lo que supone más de 43 por ciento del total. El proyecto de receta interoperable se implantó en el SESCAM en colaboración con las oficinas de farmacia de la región y bajo la coordinación del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.
Con este proyecto de receta interoperable, se evita la carga burocrática para los profesionales de Atención Primaria, que han visto cómo sus agendas se liberan de citas para realizar recetas, ganando tiempo para una atención más completa de sus pacientes. Para ello, las oficinas de farmacia disponen de un lector de bandas magnéticas capaz de extraer el Código de Identificación del Paciente de la banda, independientemente de cuál sea la comunidad autónoma emisora de la tarjeta sanitaria individual del paciente.
Una vez identificado correctamente el paciente, el aplicativo proporciona a través del nodo central del Ministerio, el listado de medicamentos autorizados en su comunidad autónoma de origen, del mismo modo que se viene trabajando habitualmente con los ciudadanos de Castilla-La Mancha, dispensando la medicación que requiera el paciente y con la misma aportación que si estuviese en su comunidad de origen.