Unas jornadas están teniendo lugar en una decena de centros de Formación Profesional de Castilla-La Mancha con el objetivo de promover que los profesionales de la hostelería ofrezcan vino de la región. El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, visitó el viernes el IES ‘Universidad Laboral’ de Albacete, donde se imparte formación específica a los alumnos del ciclo superior de Dirección de Cocina y del ciclo de Dirección de Servicios de Restauración.
Martínez Arroyo subrayó la importancia de fomentar el consumo moderado de vino entre los adultos, enfatizando en que debe ser promovido solo entre mayores de 18 años y destacando que es necesario «conocer lo que es el vino para apreciarlo y disfrutarlo». Enfatizó en que la cultura del vino es fundamental para el futuro de Castilla-La Mancha, ya que representa el 5% del PIB de la región.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de que las personas que ofrecen vinos lo hagan con conocimiento, subrayando que en Castilla-La Mancha se pueden encontrar nueve Denominaciones de Origen y diversas variedades de uvas con características únicas. Los cursos que se imparten desde el Gobierno regional a través de la Fundación Tierra de Viñedos en colaboración con la Organización Interprofesional del Vino de España se enfocan en el consumo moderado de vino, educando al personal de hostelería sobre cómo proporcionar un servicio responsable, y cómo abordar la problemática del abuso del alcohol.
El objetivo principal del convenio es no sólo favorecer el conocimiento de los vinos de la región, e incrementar su presencia en las cartas de restaurantes y locales de restauración de Albacete, Ciudad Real, Puertollano, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Talavera de la Reina, sino también involucrar a los diferentes agentes implicados en el sector gastronómico como los productores agroalimentarios, establecimientos de hostelería y restauración, enólogos, cocineros, medios de comunicación e instituciones.
Martínez Arroyo espera que estos esfuerzos educativos lleven a que los hosteleros ofrezcan primero los vinos regionales, promoviendo así la cultura vitivinícola de la región y su tesoro vitivinícola.