La cocina de la próxima gran final de MasterChef Celebrity se ha visto sacudida por la eliminación de un nuevo aspirante. En esta ocasión, Mala Rodríguez se ha visto obligada a colgar el delantal después de una dura jornada, donde la creatividad y la técnica fueron clave en la prueba.
Los jueces del concurso, siempre exigentes, presentaron un reto que buscaba desafiar a los concursantes a transformar ingredientes básicos en platos de alto nivel, utilizando técnicas de vanguardia. La patata y el huevo, ingredientes sencillos, debían unirse a otros más sofisticados, como el caviar, en una propuesta que, para algunos, resultó ser un verdadero quebradero de cabeza.
Aunque todos los participantes sufrieron algún tropiezo en su elaboración, fue Juanjo Bona quien se destacó por su desempeño, ganándose los aplausos del jurado a pesar de haber enfrentado uno de sus días más complicados. Miguel Torres, el cantante, también se destacó entre los semifinalistas, haciendo borrón de los errores y logrando efectivamente cautivar con su plato.
Por el contrario, las críticas no fueron favorables para Mala Rodríguez. Su propuesta no solo careció de la innovación requerida, sino que tampoco logró impresionar el paladar de los jueces, quienes la calificaron como «básica» y con «muchos defectos». Tras su eliminación, la cantante reflexionó sobre su experiencia, reconociendo que se sentía perdedora desde el principio pero sin dejar de apreciar lo que había aprendido a lo largo del camino.
Mariló Montero también enfrentó sus propios desafíos. Consciente de la presión del tiempo, improvisó casi al final de la prueba, aunque su esfuerzo fue recompensado con la aprobación del jurado, quienes pudieron ver en su plato recicladas algunas de las técnicas aprendidas durante el programa.
Mientras la velada llegaba a su fin, la atmósfera en el plató era agridulce. Las emociones fluyeron a medida que los concursantes reflexionaban sobre sus respectivas trayectorias en un programa que ha desafiado no solo sus habilidades culinarias, sino también su espíritu. Así, la salida de Mala Rodríguez ha marcado el cierre de una etapa, mientras que los contendientes restantes se preparan para la recta final, donde la exigencia no hará más que aumentar.
