El Balonmano Alarcos Ciudad Real ha quedado fuera de la competición por un puesto en la fase final para el ascenso a la División de Honor Plata Masculina, una categoría de la que descendieron la temporada pasada. Este desenlace se dio tras su derrota ante Pinto con un marcador de 26-25 y el triunfo del Cajasur Córdoba frente a Leganés, que culminó con un resultado de 43-30. Estos resultados han sellado el destino del equipo para esta temporada, impidiéndoles avanzar en su lucha por el ascenso y marcando un momento de reflexión para la plantilla y la dirección técnica.
Juan Pablo Marciel, presidente de la entidad, ha compartido su evaluación de la temporada durante la presentación del sector juvenil masculino. Marciel destaca que, después del descenso, este ha sido un año de ajustes significativos, incluyendo la incorporación de un nuevo entrenador y muchos cambios en la composición del equipo. A pesar de considerar que la temporada no ha sido mala, reconoce que han fallado en partidos clave que podrían haber cambiado su suerte. La temporada, según Marciel, ha sido de reconstrucción, marcada por lesiones y otros desafíos, pero también de esfuerzo y dedicación por parte de todos los jugadores. Con la mirada puesta en el futuro, ya se están planificando renovaciones y fichajes, con un énfasis especial en el apoyo a la cantera y en mantener la esencia y ambición del equipo intactas.