Manuel Serrano asume la alcaldía de Albacete luego de la sesión de investidura que se llevó a cabo el sábado, donde la lista del Partido Popular resultó la más votada.
De esta manera, el candidato del PP fue oficialmente nombrado nuevo alcalde de Albacete y gobernará en minoría, ya que no obtuvo los votos necesarios para alcanzar la mayoría absoluta.
«Es un verdadero honor y una gran responsabilidad que los ciudadanos de Albacete hayan depositado su confianza en mí. Esperamos estar a la altura y no defraudar», afirmó Serrano minutos después de jurar el cargo.
El nuevo alcalde de Albacete se comprometió a gobernar con «transparencia y honradez», buscando convertir la ciudad en un municipio acogedor con una oferta deportiva, cultural y turística durante todo el año.
Asimismo, reiteró algunas de las medidas propuestas en su programa electoral, como la reducción del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), la plusvalía y el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), así como la mejora del sistema sanitario.
En este sentido, Serrano aseguró que lo primero que hará como alcalde será instar al presidente de Castilla-La Mancha a mejorar urgentemente los servicios de salud en la ciudad. «La situación sanitaria está peor que nunca, las urgencias y la atención primaria están colapsadas. Nos debemos a nuestros vecinos y debemos solucionarlo», afirmó.
Por último, mencionó a los concejales que no continuarán en el cargo durante los próximos cuatro años y les deseó éxito en su nueva etapa profesional.
Durante la sesión también intervinieron los portavoces de los otros grupos municipales con representación en el Ayuntamiento.
Desde Unidas Podemos, Nieves Navarro expresó una «sensación agridulce» ya que preferiría un gobierno progresista que impulse el progreso de la ciudad, pero señaló que sigue manteniendo la ilusión y felicitó a Serrano.
Por su parte, el portavoz de Vox, José Ramón Conesa, anunció que reducirán su sueldo un cinco por ciento cada año de legislatura y, en caso de no ser posible, donarán el dinero a asociaciones.
Además, envió palabras de ánimo a Rafa Lomana, quien fue diputado nacional por Albacete y no continuará en el cargo. «Es una persona que ha dado todo por esta ciudad y no es tenida en cuenta para las próximas elecciones», destacó.
Por último, desde el PSOE, Emilio Sáez tomó la palabra y resumió brevemente el mandato, marcado por la pandemia y la tormenta Filomena. Reiteró el compromiso de su partido de ejercer una oposición «constructiva», con voluntad negociadora.
«El PSOE estará alerta para que no se pierda ningún servicio. Albacete merece que se cumplan las promesas», concluyó.
Durante el pleno, como es habitual, se guardó un minuto de silencio en memoria de las mujeres víctimas de la violencia de género.