Estos días se celebra el Día de la Juventud es un buen momento para analizar cómo son las pólizas de coche para este colectivo. De hecho, se dice que los seguros de auto para estos conductores son más caros. ¿Qué hay de verdad en ello y cuáles son los factores que tienen en cuenta las aseguradoras?

La edad, clave para el seguro

Así, la edad es un factor clave a la hora de calcular el precio de un seguro de coche. Y los conductores menores de 25 años suelen ser considerados por las aseguradoras como clientes con mayor riesgo. El principal motivo es que cuentan con menos experiencia al volante, es decir, tienen el carnet de conducir desde hace menos tiempo.

Además y según las estadísticas iniciales, suelen ser más imprudentes y agresivos, algo que les hace más propensos a tener accidentes de mayor gravedad.

Casi tres veces más por el seguro

En este punto es importante reiterar que estamos hablando de la gravedad de los accidentes que tienen, y no del número de partes que presentan a la aseguradora. Es decir, las indemnizaciones por daños personales y fallecimiento son superiores en esta franja. Y no solo eso, sino que la probabilidad de que una persona de entre 18 y 35 años tenga un accidente grave es 1,6 veces superior a que lo sufra una de más de 35.

Consecuentemente, sus seguros suelen ser también más caros. Un conductor joven puede pagar casi tres veces más por su póliza de auto que uno muy experimentado. Además, existen aseguradoras que directamente excluyen estos perfiles.

Respecto al número de partes, los datos de Acierto.com indican que las personas entre 18 y 23 años presentan la mitad de partes que los mayores de 65 años. Sin embargo, los siniestros que tienen estos últimos conductores revisten menor gravedad y, por lo tanto, suponen un coste y riesgo menor para las aseguradoras. De ahí que sus seguros sean más económicos. Y es que los siniestros no solo incluyen accidentes, sino averías en carretera, una rozadura en un parking, y similares.

Qué jóvenes conducen mejor

Algo similar ocurre si diferenciamos entre las mujeres y los hombres. Ellas dan más partes, pero los de ellos revisten mayor gravedad. De hecho, las mujeres de entre 18 y 23 años son responsables de un 7% más de partes que sus homólogos varones.

Por otra parte, las provincias cuyos jóvenes conducen mejor son Segovia, Ávila, Soria, Huesca y Teruel. En el lado opuesto se encuentran Melilla, Ceuta, Sevilla, Cádiz y Las Palmas.

Los coches que conducen los jóvenes

También es importante el coche que conducen los jóvenes. Los automóviles de más de 7 años de edad concentran el 65% de los accidentes. Y los jóvenes de hasta 21 años con coches de más de 12 años son los más propensos a tener accidentes. La falta de recursos habitual de este colectivo les hace decantarse por vehículos de segunda mano o heredados, algo que sigue incrementando los riesgos y su vulnerabilidad.

En cualquier caso, en España contamos con una flota de vehículos muy vieja. La edad media del parque automovilístico de nuestro país supera los 13 años. Con los peligros que eso implica.

Otro aspecto que puede influir en el precio del seguro es llevar el coche tuneado. Se trata de extras que deben ir declarados específicamente en la póliza. Además, un incremento de la potencia del coche o modificar la aerodinámica podría hacer recelar a la aseguradora.

Qué opciones ofrece el mercado

“En cualquier caso, cada conductor es un mundo”, comentan desde el portal Acierto. “Por eso cada vez más compañías ofrecen soluciones de tarificación a medida del estilo Pay As You Drive”. Se trata, como su propio nombre indica, de un método que permite pagar al asegurado según conduce. Lo que se hace es monitorizar la conducción a través de dispositivos y sistemas de geolocalización que controlan la velocidad, frenadas y otras actitudes al volante.

Más allá de estos, algunas compañías ofrecen seguros específicos para menores de 25 años, con coberturas específicas que incluso cuentan con asistencia nocturna, disponible desde las doce de la noche. Se trata de una prestación pensada para trasladar al cliente a su casa en taxi (si no se encuentra en condiciones para conducir) y que cuenta con servicio de grúa.

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