Los habitantes de la ribera insisten en la necesidad de modificar urgentemente las normas sobre el trasvase para evitar estar atrapados en una situación crítica.

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La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía ha enfatizado la necesidad «urgente» de cambiar las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura, a fin de evitar vivir permanentemente en situaciones críticas y extraordinarias.

En un comunicado de prensa, la asociación manifestó su preocupación tras la decisión de trasvasar 15 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura durante el mes de junio, un volumen cinco unidades menor al máximo permitido. En este sentido, recuerdan que este cambio posibilitaría un ahorro total de 140 hectómetros cúbicos durante el periodo legislativo actual, a lo que se podrían sumar otros 99 debido al cambio de las reglas de explotación.

«La situación es crítica y las perspectivas son poco alentadoras. Dada la situación hidrológica que hemos enfrentado en 2023, es imprescindible modificar las reglas para evitar volver a estar permanentemente en situaciones extraordinarias y críticas», lamentó María de los Ángeles Sierra, presidenta de la Asociación.

Por su parte, Borja Castro, vicepresidente de la Asociación, hizo hincapié en la gestión del agua realizada durante los últimos cuatro años, en respuesta a las políticas trasvasistas «preconizadas por la extrema derecha». «Los datos están ahí, aunque el progreso no sea tan rápido como nos gustaría y en ocasiones las medidas puedan parecer insuficientes, hemos logrado mejorar la estabilidad en comparación con el periodo legislativo anterior del Partido Popular. No quiero ni pensar lo que ocurriría si el Ministerio de Transición Ecológica desaparece y vuelve a integrarse con Agricultura bajo las directrices de una extrema derecha sin base científica y populista», comentó en referencia a las «amenazas directas» de Vox en relación al trasvase.

Los ribereños lamentaron no haber modificado aún las reglas de explotación del trasvase para cumplir con los caudales ecológicos requeridos y solicitaron la protección de los ríos para garantizar el cumplimiento de la normativa europea y proteger el patrimonio de todos los españoles frente a los intereses económicos de unos pocos. «Agua para todos, no para todo», concluyeron.

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