A la decimosexta fue la vencida para Diego Aguado, quien este jueves, 16 de octubre, cerró un capítulo emocionante en su vida al convertirse en el cuarto ganador del bote de 70.000 euros en Cifras y letras. Este matemático madrileño, que desde niño ha sido un fiel seguidor del programa, finalmente alcanzó el reconocimiento que tanto anhelaba, tras años de esfuerzo y dedicación.
Durante los últimos dos años, Aguado se preparó meticulosamente para el concurso. Desde que fue elegido para grabar el piloto del regreso del programa en 2024, analizó cada una de las etapas y pruebas, convirtiéndose en un experto en las mecánicas del juego. «Me he enfrentado a Cifras y letras analizándolo prueba a prueba», compartió emocionado, revelando los trucos que le ayudaron a conquistar el escenario.
En el momento decisivo de su victoria, el nerviosismo se transformó en alegría: “Estaba centrado en el programa a programa. Aunque el bote no lo veía alcanzable, sí que llegó un poco de sorpresa”, narró. Aguado se encontró realizando cálculos en su mente, y aunque tenía una llave que podría haber utilizado, decidió no sobrecargar la presión y se dejó llevar.
Mantener el secreto de su triunfo no fue tan complicado, al menos para él. “Bastante gente sabía que estaba en el casting, pero muy pocos que había grabado”, explicó, refiriéndose a sus familiares y amigos más cercanos que conocieron el desenlace antes de que se hiciera público. Ahora su mente se llena de planes sobre el dinero ganando, que tiene la intención de invertir en un proyecto personal en el ámbito de los juegos de mesa, además de considerar como opción la entrada para un piso.
Entre las preguntas que abordó, Aguado también reflexionó sobre el tema de los impuestos. “Me parece perfecto que se retenga IRPF como si fuera una nómina”, expresó con serenidad. Para él, el retorno de Cifras y letras ha sido un reencuentro con sus raíces, un programa que ha seguido desde su infancia y que ahora disfruta en una nueva versión más dinámica y moderna.
Aguado, quien también es consultor de videojuegos, se benefició enormemente de su profesionalidad en la competencia. Su pasión por el juego le ha permitido identificar estrategias efectivas. Por ejemplo, en las pruebas de letras, prefiere comenzar con seis vocales, buscando asegurar un mayor número de oportunidades para crear palabras. “Es una estrategia más defensiva”, añadió con una sonrisa.
Como un entusiasta de los juegos de mesa, recomendó títulos que estimulan la mente y que son similares a las pruebas que enfrenta en el concurso. «Código Secreto», «Just One» y «So Clover!» son algunos de sus favoritos y sugirió que estos juegos pueden ser muy útiles para quienes desean destacarse en Cifras y letras.
El viaje de Aguado hasta aquí no ha sido sencillo. Ha vivido meses de espera tras pasar el casting, pero finalmente sus esfuerzos rindieron frutos. “Estoy entre los concursantes que más tiempo han durado”, celebró, reconociendo que cada programa fue un regalo y cada desafío, una oportunidad para aprender y crecer.
La competencia y la pasión por participar en juegos han estado en su vida desde siempre. «Desde pequeño, he sido un niño de la tele», reflexionó, mientras recordaba a sus abuelos, quienes, aunque no están presentes, seguro habrían compartido su alegría.
A medida que se abre un nuevo capítulo en su vida tras esta victoria, Aguado se toma su tiempo para disfrutar el momento. Si bien no descarta participar en futuros concursos, ha decidido pausar y reflexionar sobre lo que ha logrado. “No tengo prisa. Estoy viviendo este momento”, concluyó, con una sonrisa que transmite la satisfacción de haber cumplido un sueño.