Meta, la gigante de la tecnología, ha lanzado Llama 3.1, el modelo de inteligencia artificial de código abierto más grande del sector hasta la fecha. Tras meses de adelantar que estaban trabajando en un modelo de IA que superaría a los líderes del mercado como OpenAI, Anthropic y Google, la compañía ha cumplido su promesa. Llama 3.1 está disponible para su descarga en plataformas como Hugging Face, GitHub y en el propio sitio web de Meta, aunque requiere una infraestructura considerable para ser utilizado.
A diferencia de otros modelos multimodales, Llama 3.1 se especializa solo en texto. No obstante, es capaz de realizar tareas de codificación, responder preguntas matemáticas y resumir documentos en ocho idiomas diferentes, incluyendo PDFs y hojas de cálculo.
Llama 3.1 ha sido entrenado y desarrollado con nuevas técnicas que le permiten superar al GPT-4 de OpenAI en la ejecución de código y generación de gráficos. Sin embargo, las pruebas iniciales indican que sus capacidades multilingües y de razonamiento general aún son inferiores.
El modelo ha sido entrenado en el mismo tipo de datos que sus predecesores, abarcando idiomas no ingleses, código, matemáticas, datos web y datos sintéticos creados por otros modelos de IA. Meta ha implementado un control de calidad y filtrado rigurosos para mejorar la precisión del modelo.
A pesar de estos avances, Meta no ha revelado con precisión de dónde provienen todos sus datos de entrenamiento, más allá de mencionar páginas web y archivos públicos. La compañía afirma que esta «fórmula secreta» es lo que les da una ventaja competitiva, una práctica común entre los gigantes tecnológicos. No obstante, los críticos sugieren que esta falta de transparencia es una táctica para retrasar las inevitables demandas por derechos de autor, dado que Meta entrena sus modelos con publicaciones, fotos y comentarios de Instagram y Facebook, complicando así la posibilidad de que los usuarios puedan optar por no participar.
Meta continúa trabajando en mejorar sus modelos, y la comunidad tecnológica espera ansiosamente ver cómo Llama 3.1 influirá en el panorama de la inteligencia artificial.
