En un notable esfuerzo de cooperación internacional, un vehículo oruga M88 de recuperación de tanques estadounidense, junto con los cuatro soldados de la 1ª Brigada de la 3ª División de Infantería de Estados Unidos que habían desaparecido durante un ejercicio militar el 25 de marzo, han sido exitosamente rescatados de las profundidades de un pantano en Lituania, informó el Ministerio de Defensa lituano. La operación, llevada a cabo a primera hora del lunes, marcó el final de una búsqueda angustiosa tras la desaparición de los militares en una zona de entrenamiento.
El comunicado del Ministerio de Defensa refleja el delicado procedimiento y la colaboración entre las fuerzas de Lituania, Estados Unidos y Polonia. Equipos especializados y buzos, en un esfuerzo conjunto, fueron capaces de localizar y extraer el vehículo de 60 toneladas, especializado en remolcar carros de combate y otros vehículos blindados, de una ciénaga profunda cerca de Pabrade, al borde de la frontera con Bielorrusia.
El vehículo fue hallado el pasado miércoles a unos 5 metros de profundidad y su recuperación sólo pudo iniciarse tras la llegada de equipo especializado y personal de buceo al sitio. Descripciones de medios locales resaltan la complejidad de la operación, mencionando cómo fue necesario retirar el lodo y evitar la filtración de agua en el punto donde el M88 había sucumbido.
Mientras el alivio por la exitosa recuperación del vehículo impera, las autoridades mantienen un cauteloso silencio respecto al destino de los cuatro soldados involucrados, declarando que cualquier información al respecto será comunicada por el Ejército estadounidense. La Policía Militar lituana y los investigadores de Estados Unidos continúan trabajando en el área, y se ha pedido respeto y solidaridad hasta que más detalles se hagan disponibles. La ministra de Defensa lituana, Dovilė Šakalienė, aludió a un «acuerdo muy estricto» con Estados Unidos para garantizar que la información sobre los soldados desaparecidos sea divulgada primordialmente por las autoridades estadounidenses.
Esta operación no solo subraya la solidaridad y la eficacia de la cooperación internacional en situaciones de emergencia sino que también pone de relieve los desafíos cotidianos y riesgos a los que se enfrentan las fuerzas armadas durante los ejercicios militares. La comunidad espera ansiosamente noticias positivas sobre los soldados desaparecidos, manteniendo la esperanza de su seguridad y pronta reunión con sus seres queridos.