El Gobierno regional ha puesto en marcha un proceso de licitación con un presupuesto de 10,7 millones de euros destinado a la creación de la Plataforma Agroalimentaria en Red (Proyecto PAN). Este proyecto forma parte del programa de Redes Territoriales de Especialización Tecnológica (RETECH), que es una iniciativa conjunta promovida por cuatro comunidades autónomas españolas: Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y La Rioja. Bajo el liderazgo de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, el Proyecto PAN busca desarrollar un «ecosistema digital en toda la cadena agroalimentaria» con un enfoque integral y transversal, haciendo uso de la Inteligencia Artificial y compartiendo un espacio de datos comunes entre las comunidades participantes.
En este contexto, el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, destacó la proactividad de la región al ser «la primera en licitar su colaboración en el proyecto PAN». El consejero enfatizó la importancia de aprovechar los Fondos Europeos de Recuperación para el avance en la modernización del sector primario, un sector crítico para la economía regional y nacional.
El proyecto tiene un plazo de 19 meses para su ejecución tras ser adjudicado y su ambición es digitalizar todos los eslabones de la cadena alimentaria. Esto incluirá la digitalización del cuaderno de campo, la mejora en la toma de decisiones, la facilitación de los intercambios comerciales mediante la unificación de oferta y demanda, y la optimización de los procesos de la cadena de valor. Todo ello con el fin de garantizar la transparencia en la cadena alimentaria y ofrecer un espacio de datos seguro y compartido a todos los actores involucrados, como agricultores, ganaderos y empresas del sector alimentario.
El financiamiento del Proyecto PAN se realiza a través de los fondos RETECH. El proyecto se dio a conocer públicamente en un evento realizado en Toledo hace un año, el cual fue presidido por Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, y contó con la presencia de Nadia Calviño, en ese entonces vicepresidenta primera del Gobierno de España, así como con representantes de las comunidades autónomas implicadas y profesionales del sector.