En una de las entrevistas más esperadas en el panorama televisivo español, Leire Díez se enfrentó a las difíciles preguntas del programa «Todo es mentira» de Cuatro, presentado por Risto Mejide. La conversación se desarrolló en medio de un huracán informativo que arroja cada vez más sombras sobre la política en España, con Díez en el centro del torbellino, negando vehementemente ser lo que muchos medios han denominado la ‘fontanera’ del PSOE.
El encuentro televisivo fue en directo, lo que añadió tensión al enfrentamiento entre Díez y los colaboradores del programa, entre ellos, la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, quien no se contuvo a la hora de expresar su opinión sobre la invitada. Con términos como «falsa», «soberbia», y «frivolona», Oramas criticó duramente a Díez, acusándola de formar parte de las mismas ‘cloacas’ que afirmaba estar investigando. Estas acusaciones fueron respaldadas por comentarios de figuras destacadas del PSOE, como Emiliano García-Page y Cristina Narbona, quienes lamentaron su implicación en estas controversias.
La tensa entrevista también dio lugar a que Díez explicara su reciente salida del PSOE, algo que, según ella, hizo voluntariamente para poder hablar libremente en televisión, aunque espera que sea temporal. Esta decisión, según Ana Oramas, no hace más que dañar al partido, ya que demuestra una falta de coherencia ideológica y un deseo de evitar responsabilidades.
El momento culminante del programa reflejó no solo las profundas divisiones dentro del panorama político español, sino también el papel que los medios de comunicación juegan en el escrutinio de estas figuras públicas. La entrevista, además, puso de relieve la compleja relación entre política y medios, y cómo esta interacción puede influir en la percepción pública de los políticos en el escenario nacional.
La aparición de Leire Díez en «Todo es mentira» marca un momento definitivo en la cobertura mediática de la política española, dejando claro que las controversias que giran en torno a estas figuras no están ni mucho menos resueltas. La expectativa de si esta entrevista moderará las aguas turbulentas en las que navega el PSOE o las agitará aún más, sigue en el aire.
