El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la consejera de Igualdad y portavoz regional, Blanca Fernández, ha calificado de «magníficas noticias» tanto el aporte de agua que ha comenzado a producirse esta semana en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) como la próxima puesta en funcionamiento de la Tubería a la Llanura Manchega.
Sobre el primer asunto, la derivación puntual y urgente de agua a las Tablas de Daimiel dentro del programa de recuperación hídrica del parque, la consejera portavoz del Ejecutivo regional ha explicado que «tenemos un aporte de agua magnífico de 600 litros por segundo que la semana que viene se convertirán en 800, lo que permitirán tener encharcadas unas 350 hectáreas aproximadamente y tener garantizada esta reserva de la biosfera que hay que poner en valor y preservar entre todos, aunque sea en condiciones mínimas pero óptimas para la biodiversidad».
Sobre la segunda cuestión, Blanca Fernández se ha congratulado por las pruebas que se están realizando para comprobar el buen funcionamiento de la Tubería a la Llanura Manchega, una infraestructura «que ha sufrido muchos años de paralización injustificable e injustificada», y tras las reformas «se pondrá en marcha el ramal principal. Una magnífica noticia para la provincia de Ciudad Real –con dificultades estructurales en cuanto a abastecimiento humano– y una parte de Albacete y de Cuenca».
RECUPERAR LA FILOSOFÍA DEL PLAN DEL ALTO GUADIANA
Ello no ha sido óbice para que como Gobierno regional haya «lamentado profundamente que una vez existió un Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), un plan que si se hubiera ejecutado hubiera conseguido sus objetivos, seguramente las Tablas de Daimiel tendrían otras condiciones, también el acuífero y los agricultores y agricultoras», según ha informado la Junta en nota de prensa.
Pese a ello, Blanca Fernández ha apelado a hacer una «reflexión compartida alejada de intereses partidistas», precisamente para analizar qué le interesa a la provincia de Ciudad Real y a la región en torno al acuífero 23 y a las Tablas de Daimiel», pues si algo tiene claro es que «debe existir regadío porque es esencial para mantener nuestra tierra y la economía de Castilla-La Mancha, pero también para preservar el presente y futuro de agricultores y ganaderos porque con ellos va el futuro de la región».
A modo de recapitulación, la consejera de Igualdad y portavoz ha destacado que se trata de 350 hectáreas que se verán encharcadas en el parque nacional de las Tablas de Daimiel, pero también «son 350 millones de euros lo que han costado hasta ahora todas las obras que se llevan ejecutadas de la Tubería a la Llanura Manchega».
Y sin salir este ámbito, Blanca Fernández ha confirmado que «hace unos días se firmó el contrato para el ramal que va a dar abastecimiento al Campo de Calatrava, a la Mancomunidad del Gasset y a la propia capital». En este sentido, ha dicho que «esta inversión viene a resolver necesidades estructurales que teníamos, pero hay que seguir trabajando en la misma línea y retomar la filosofía del Plan Especial del Alto Guadiana».
RESTAURAR LA BIODIVERSIDAD Y LOS VALORES DEL PARQUE NACIONAL
Por su parte, el director general de Medio Natural y Biodiversidad y a su vez presidente de la Comisión mixta de Gestión de los Parques Nacionales de Castilla-La Mancha, Félix Romero, ha enfatizado que esta «actuación de emergencia y puntual se enmarca en la estrategia conjunta de ambos Gobiernos, nacional y regional, por el futuro de las Tablas de Daimiel, y la recuperación de su funcionalidad ecológica, que pasa por garantizar la cantidad de agua que determinan las normativas europeas por estar incluido en la Red Natura 2000 y ser un paraje clave de la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda».
Como ha explicado Romero, ante la importante situación de sequía, se tomó la decisión de realizar la derivación de seis hectómetros cúbicos mediante un aporte extraordinario (evitando los meses de verano), que se ha estructurado en dos partes: tres hm3, que son los que está entrando ahora, relativos a la solicitud de la Comisión Mixta y que fue autorizada por la Comisión de desembalse del acueducto Tajo-Segura a finales de abril y los otros tres hm3 aportados en paralelo con la puesta en funcionamiento de la tubería a la llanura manchega.
Así, los próximos meses «habrá una lámina de agua suficiente como para asegurar la invernada de las aves este año y favorecer el turismo de naturaleza teniendo en cuenta además que el año que viene se celebra el 50 aniversario de la declaración de este parque».
En palabras del responsable de Medio Natural y Biodiversidad, a partir de este momento» la responsabilidad es de todos y por ello queremos fomentan la implicación de la ciudadanía, agricultores, territorio y además también implicar a los consumidores, para lo cual estamos ultimando la marca ‘Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda’ que verá la luz este mismo año». «Una marca que va a dar un valor añadido al territorio diferenciando positivamente los productos y servicios que contribuyen a la conservación y restauración de los valores ambientales propios de esta reserva, siendo el uso estado de las masas de agua el elemento central», ha añadido.
ACTUACIONES DE MEJORA EN LA ISLA DEL PAN
Posteriormente, se han visitado las actuaciones de restauración ambiental que se están llevando a cabo en el itinerario de la Isla del Pan, iniciadas el pasado 27 de julio con financiación proveniente de los fondos europeos Next Generation y con un presupuesto de 500.000 euros así como un plazo de ejecución mínimo de tres meses.
Tal y como ha manifestado Romero, la superficie inundable del itinerario se encontraba en regresión debido a la acumulación de sedimentos y de materia orgánica, con proliferación de algas y presencia de malos olores, «por lo que se hacía urgente retirar toda la vegetación muerta y lodos acumulados de la cubeta reducida en superficie por el desarrollo de plantas subacuáticas que no eran las propias de esa parte del espacio natural, generando una marcada pérdida de biodiversidad».
El objeto de la actuación es recuperar las zonas inundables libres de vegetación y especialmente su masegar original, principal hábitat del parque, así como las praderas de plantas subacuáticas, contribuyendo a restaurar su biodiversidad y sus valores, para el conocimiento y disfrute de los visitantes del Parque. Para ello, ha sido necesario suspender el acceso a la Isla del Pan.
Así, se está procediendo al decapado superficial mecánico de los sedimentos acumulados que también serán transportados fuera de la cubeta a las parcelas propiedad del Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN). También se llevarán a cabo trabajos de mejora de las infraestructuras del itinerario mediante la sustitución de un tramo de pasarela y un observatorio faunístico por otros de nueva construcción o el reforzamiento de otros tramos.
Finalmente, se van a acometer actuaciones como soterramiento de líneas eléctricas, medidas contra vegetación invasora, actuaciones de restauración de ecosistemas terrestres o adquisiciones de fincas en el entorno del Parque Nacional.
De su lado, el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, ha coincidido con la portavoz de la Junta al señalar que «todo aquello que incremente el nivel de encharcamiento del humedal es una buena noticia». Sierra, que ha recordado que el trasvase ha sido reclamado en distintas ocasiones en el Pleno del Ayuntamiento de Daimiel y a través de Patronato Rector de Las Tablas, cree fundamental ver alternativas a futuro «realistas», según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.