En la reunión celebrada este lunes, el Ministerio para la Transición Ecológica ha presentado un nuevo marco normativo para el trasvase Tajo-Segura que modifica los criterios de gestión de los recursos hídricos. Las modificaciones más significativas incluyen el aumento del umbral para activar la situación de nivel 2 de los embalses de cabecera, que se eleva a 1.600 hectómetros cúbicos, un incremento de 300 hectómetros cúbicos respecto a la normativa actual. Esta medida complica las condiciones bajo las cuales se permitirá el trasvase, alejando aún más la activación del nivel 1, que habilita el trasvase de hasta 60 hectómetros cúbicos.
Con esta nueva normativa, si se hubiera aplicado en la actualidad, el triple trasvase autorizado el lunes se habría limitado a 24 hectómetros cúbicos para cada autorización, distanciándose de los 60 hectómetros que se prevé trasvasar. Además, la norma establece una reducción en la cantidad de agua que se puede trasvasar en una situación de nivel 2, bajando de 27 a 24 hectómetros cúbicos.
Entre las novedades introducidas, se contempla que, en caso de alcanzar el nivel 3 de almacenamiento, los trasvases serán automáticos y se fijarán en 11 hectómetros cúbicos, un cambio significativo respecto al sistema anterior en el que el Ministerio decidía, permitiendo trasvases de hasta 20 hectómetros por cada operación.
La intención detrás de estas nuevas reglas es estabilizar los niveles de los embalses en un estado de nivel 2, una situación que, de acuerdo a las previsiones, se espera que se mantenga el 82% del tiempo. Estas modificaciones esperan responder a la creciente necesidad de una gestión más sostenible y eficiente de los recursos hídricos en la cuenca del Tajo y su impacto en los usuarios del trasvase.
