El debate en las Cortes de Castilla-La Mancha ha concluido este jueves con la aprobación de los presupuestos para la Comunidad Autónoma para 2025, marcando así el décimo presupuesto bajo la administración del PSOE. La aprobación ha sido posible gracias a la mayoría absoluta del partido socialista, a pesar del rechazo manifestado tanto por el PP como por Vox. La jornada ha estado caracterizada por un consenso en las enmiendas relativas al gasto por la DANA y la breve duración del debate, que se limitó a 7 horas.
En la votación, los diputados socialistas rechazaron todas las enmiendas que quedaron vivas tras su rechazo en la Comisión de Presupuestos, lo que incluyó 951 enmiendas del PP y una de Vox. El único momento en que Vox intervino durante el debate fue a través del diputado Francisco José Cobo, quien lamentó el «gasto político» y la ineficiencia de las estructuras autonómicas, aunque su intervención se limitó a una única propuesta relacionada con el primer bloque.
Por parte del PP, el diputado Santiago Serrano utilizó su turno para plantear que sus enmiendas pretendían reflejar la «realidad» y cuestionar las previsiones del Gobierno regional, a lo que el socialista Fernando Mora respondió tachando estas enmiendas de «más falsas que el alma de Judas». Para el diputado socialista, la oposición del PP no estaba fundamentada y sus propuestas parecían más una «carta a los Reyes Magos».
El bloque de Hacienda y Transformación Digital fue otro de los focos de confrontación. Serrano acusó al Gobierno de tener a la Comunidad en «el furgón de cola» en términos económicos, mientras que Mora insistió en que no existía un «infierno fiscal» y sugirió que el debate sobre el gasto por la DANA no tenía mucho más que discutir.
La diputada del PP, Tania Andicoberry, llevó la voz sobre las ayudas a la conciliación laboral para mujeres, a lo que el PSOE replicó que sus enmiendas eran un reflejo de la falta de originalidad y rigor. En cuanto a Fomento, el ‘popular’ Nacho Redondo criticó los presupuestos de la Consejería, defendiendo que no estaban a la altura de las necesidades en infraestructura, mientras que la socialista María Isabel Sánchez defendió el incremento presupuestario en este área.
En educación y juventud, María Gil del PP subrayó el incumplimiento de la Junta, mientras que Paloma Jiménez del PSOE rechazó las enmiendas del PP por considerarlas irreales y repetidas. En materia de Deportes y Cultura, Redondo expresó su preocupación por la disminución de ayudas a federaciones, y Contreras se defendió citando el aumento en el gasto cultural.
En aspectos de Empleo, Itziar Asenjo, del PP, se mostró frustrada por las escasas enmiendas aceptadas en esta área, mientras que Paloma Sánchez defendió el enfoque del PSOE. En el ámbito de Sanidad, Juan Antonio Moreno Moya criticó la falta de recursos, a lo que Contreras respondió que el presupuesto sanitario estaba en crecimiento continuo.
El bloque de Bienestar Social también generó controversia, donde se discutió sobre la gestión de los recursos para personas dependientes. En Agricultura, Carolina Agudo buscó garantizar el apoyo al campo, pero su postura fue criticada por el socialista Antonio Sánchez Requena.
El debate culminó con intervenciones sobre Desarrollo Sostenible y agua. Santiago Lucas-Torres del PP evidenció problemas estructurales en los recursos hídricos, mientras que Mora rechazó las propuestas del PP como inviables.
Finalmente, el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, descalificó la actuación de Vox y acusó al PP de intereses que favorecen a quienes más tienen, cerrando así un debate caracterizado por la profunda división entre los partidos.
