La Teoría del Laboratorio Gana Terreno: Expertos Reevalúan el Origen del COVID-19 en China

En un vuelco significativo a las teorías sobre los orígenes de la pandemia de COVID-19, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) ha anunciado que ahora considera «más probable» que el virus haya surgido debido a una fuga de laboratorio en China, más que de una fuente natural. Este cambio de criterio supone una divergencia notable respecto a las declaraciones previas de la agencia, que mantenía ambas hipótesis -la fuga de laboratorio y el origen natural- como igualmente probables.

Este giro en la postura de la CIA se ha producido tras la integración de John Ratcliffe como nuevo director de la agencia, designado por el presidente Donald Trump. Ratcliffe, en una entrevista concedida a Breitbart, enfatizó que determinar los orígenes precisos del COVID-19 sería una de sus prioridades desde el primer día en el cargo. “La evaluación de la CIA sobre los orígenes de la COVID-19 sería «una cuestión del primer día», afirmó Ratcliffe.

El portavoz de la CIA ha expresado, a través de un comunicado recogido por la agencia Bloomberg, que la evaluación actual, realizada con «baja confianza», sugiere que un origen vinculado a la investigación del virus es más plausible que uno natural, basados en el cúmulo de informes disponibles hasta la fecha. Sin embargo, la CIA todavía considera ambos escenarios como posibles y ha declarado que está abierta a revisar su postura frente a nuevos informes de inteligencia o información recabada de fuentes abiertas.

Este cambio radical en la narrativa de la CIA se dio a conocer semanas antes de la asunción de Ratcliffe, durante la administración de Joe Biden, aunque el informe fue desclasificado por Ratcliffe poco después de su llegada. La modificación de la postura de la CIA parece reflejar la influencia de nuevas valoraciones y la presión para adoptar una postura definida, como sugirió el anterior director Bill Burns.

La designación de Ratcliffe y este reciente anuncio sobre los orígenes del COVID-19 reviven debates sobre la denominada «retórica de China» impulsada anteriormente por el presidente Trump, quien frecuentemente se ha referido al coronavirus como el «virus de China».

Esta nueva valoración por parte de la CIA no solo tiene implicaciones significativas para la comprensión pública y global de la pandemia de COVID-19, sino que también podría influir en la dinámica geopolítica internacional, en particular en las relaciones entre Estados Unidos y China. Se avecinan debates y análisis en el ámbito de la salud pública, la inteligencia y la política exterior en relación a este controvertido cambio de postura de una de las agencias de inteligencia más prominentes del mundo.

Scroll al inicio