En un giro inesperado que dejó a los aficionados de «Supervivientes 2025» atónitos, Anita Williams ha sido proclamada la cuarta finalista del reality show, tras una votación en la que se enfrentó a su propia pareja, marcando uno de los momentos más emocionantes de la competencia. Pese a las altas expectativas puestas en ella por ser una de las concursantes más carismáticas y fuertes, no logró convencer al público en la recta final, llevándose el premio mayor un contrincante masculino.
La última etapa de «Supervivientes 2025» se presentaba como una batalla reñida para el collar de último líder, honor que recayó en Álvaro Escassi, dejando a Williams entre los demás finalistas luchando por el cariño del público. A pesar de las múltiples campañas de apoyo y de haber esquivado con destreza las nominaciones anteriores, incluso salvándose de la expulsión en numerosas ocasiones gracias a su habilidad para liderar y su inmunidad, Anita cayó en el cuarto puesto. Los últimos datos mostrados en la gala final revelaron que solo el 20% de los votos apoyaron a la catalana, siendo superada por Montoya y otro compañero, en una votación que ha sorprendido a propios y extraños.
La decepción fue palpable entre los seguidores de Williams, especialmente después de ser considerada como una clara favorita para llevarse el premio final de 200.000 euros. Su participación en «La isla de las tentaciones» previamente le había granjeado un sólido seguimiento en redes sociales, donde muchos de sus fans anticipaban su victoria, basándose en las encuestas oficiales de Mediaset y Telecinco en X (anteriormente Twitter).
Sin embargo, la famosa «teoría del 50%» mencionada a menudo por Belén Rodríguez, podría haber jugado en contra de Williams. La división del voto entre ella y su pareja podría haber sido un factor determinante en el desenlace de su participación. Ambos compartían una base de fans significativa que seguía fielmente el programa producido por Cuarzo TV, lo que al final pudo haber diluido el apoyo necesario para asegurar su posición en el podium.
Este inesperado giro en los acontecimientos subraya la imprevisibilidad del programa y cómo las dinámicas de votación pueden cambiar de un momento a otro. Mientras Anita Williams asimila su posición como cuarta finalista, el debate sobre la influencia de las estrategias de votación y la lealtad de los fans sigue más vivo que nunca entre los seguidores de «Supervivientes».