En caso de ser elegida alcaldesa de La Solana, la candidata del PP, Luisa Márquez, tiene previsto llevar a cabo una auditoría de las cuentas y procesos urbanísticos del Ayuntamiento para conocer su situación real. Según ha asegurado en una entrevista con Europa Press, la localidad presenta numerosos problemas, que van desde el incumplimiento de la legalidad en materia de contratación hasta la falta de conclusión de obras urbanizadoras correspondientes a la Zona Norte y Vial 8. También ha señalado la necesidad de abordar la deuda financiera municipal, controlar los costes de las empresas contratadas y reducir la presión fiscal sobre los ciudadanos.
Márquez ha manifestado su compromiso de afrontar todos estos problemas, depurar responsabilidades y aplicar una política técnica y de gestión, tanto en la ejecución del gasto como en el desarrollo urbanístico. Para ella, lo más importante es finalizar adecuadamente la urbanización del Vial 8 y desarrollar una nueva fase, más cercana al núcleo urbano, con eficiencia en los servicios públicos.
En su opinión, el principal activo de La Solana son sus habitantes y su sector primario, pero también es necesario impulsar el turismo y la cultura. Para ello, propone proyectar la agroalimentación de la localidad al exterior, mejorar la gestión y llegar a acuerdos supralocales para descongestionar la salida del municipio. Asimismo, considera importante que el Estado tome cartas en el asunto para desarrollar las zonas rurales de manera sostenible y equilibrada.
Por último, Márquez ha señalado que la política del agua será otro factor clave para la supervivencia de La Solana y que buscará la colaboración interadministrativa para mejorar el municipio. En cuanto a la política de pactos, la candidata prefiere no especular y esperará al día después de las elecciones para abordarla, aunque su socio preferente siempre serán los ciudadanos.