Un giro inesperado sacude el marquesado: la muerte de Jana y sus secuelas
La muerte de Jana no solo ha sido una sacudida para los espectadores, sino que ha hecho cambiar totalmente el rumbo de la narración. El giro de esta historia, que muchos asemejan a la muerte de Ned Stark de ‘Juego de Tronos’, ha dejado a los personajes en una situación semivacía, de ausencia y desesperación que representa por completo el vacío que experimentan los espectadores.
Cruz, en prisión provisional y ya abandonada por su familia, se ha convertido en el foco de una historia oscura, de intriga y misterio. Aunque todos piensan que la culpable de la muerte de Jana es Cruz, lo cierto es que hay alguien que no piensa así, porque sabe que no es culpable de este crimen en particular. Curro, atormentado por la inquietud de descubrir lo que ha pasado, comienza una investigación que lo llevará a interrogar a todos los habitantes del palacio.
La desaparición, una vez más, del doctor Gamarra, quien insinuó que hubo alguien que hizo para que la muerte de Jana llegara tal como llegó, añade también el suspense que falta en la historia. La muerte de Jana ha mostrado las tensiones latentes en el Marquesado de Luján. Con la familia en proceso de autodestruirse, cada uno de los personajes se enfrenta con sus demonios. Manuel, totalmente hundido por la muerte de su amada, se encuentra en un punto crítico entre su vida y lo que había sido su futuro.
La carta de la Casa Real fue un impacto fuerte, pero la llegada de Blanca Palomar podría ser el empujón que tanto necesita para seguir adelante. ¿Encontrará Manuel consuelo en el trabajo y entre amigos o el fantasma de Jana lo perseguirá para siempre? Empezamos con Manuel y saltamos a la trama de Cruz que ha incorporado un nuevo nivel de complejidad a la historia; su encarcelamiento no sólo ha fracturado la familia, sino que ha puesto sobre la mesa el tema de las fracturas entre uno y otro de los personajes.
