La lluvia de primavera reduce drásticamente el déficit hídrico del primer semestre del año hidrológico.

Las lluvias de mayo y junio reducen al 20% el déficit hídrico acumulado en los ocho primeros meses del año hidrológico

De acuerdo con la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las lluvias caídas durante la segunda quincena de mayo y los primeros días de junio han contribuido a reducir en dos puntos porcentuales el déficit de precipitaciones acumulado desde el inicio del año hidrológico (1 de octubre de 2022); situándose su déficit en un 20 por ciento al 6 de junio. Este dato supone una mejoría considerable respecto a la semana anterior, cuando el déficit era del 22 por ciento, y a la anterior, cuando la falta de lluvias alcanzaba el 27 por ciento.

De esta manera, la cantidad media de precipitación acumulada desde el pasado 1 de octubre hasta el 6 de junio es de 425 litros por metro cuadrado, lo que representa un déficit del 20 por ciento en comparación con la cifra normal de este período, que es de 529 litros por metro cuadrado. Desde la Aemet se destaca que durante el periodo comprendido entre el 31 de mayo y el 6 de junio, las precipitaciones se han extendido por toda la península ibérica, así como por Baleares y, con excepción de Lanzarote y Fuerteventura, por las islas Canarias.

Por zonas, diversas regiones han recogido más de 10 litros por metro cuadrado de agua, como la mayor parte de la península, Baleares y las islas Canarias más occidentales. Además, zonas como La Palma, el Pirineo de Huesca, la sierra de Gredos, el interior de la isla de Mallorca y el noroeste de Zamora han llegado a registrar entre 60 y 100 litros por metro cuadrado. Indicativamente, se resaltan las precipitaciones acumuladas en observatorios importantes como Soria, Teruel, Lugo-Rozas, Daroca, el Puerto de Navacerrada o Santiago de Compostela-Labacolla.

A pesar de estas lluvias, que han mejorado la situación en cuanto a los mayores déficits, la mayor parte de la península ibérica y los archipiélagos canarios continúan por debajo de sus valores habituales de precipitación, especialmente en el cuadrante noreste peninsular y en la mitad sur, donde no se ha alcanzado el 75 por ciento de lo normal. En cambio, en otras áreas como Galicia, el suroeste de Castilla y León, la provincia de Cáceres o un área entre Almería, Murcia y Albacete, entre otras, las precipitaciones han superado los valores normales para el periodo 1991-2020.

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