Desde los años 80 se formó un órgano de representación de juventud: el Consejo de la Juventud Española. Poco después se fundaron los consejos de la juventud autonómicos, órganos en las que las diferentes organizaciones que trabajan con la juventud (ya sean políticas, culturales, sindicales, de voluntariado) codo con codo abordan los principales problemas de la juventud y tratan de fomentar su participación en la sociedad. Estos consejos sufrieron un duro revés durante la crisis de 2008, muchos sufrieron una liquidación total o vieron seriamente mermadas sus fuerzas. Ahora con la inflacción volvemos a ver un nuevo ataque a la juventud. Consejos como el de Navarra ha tenido que manifestarse porque cada vez reciben menos financiación de las instituciones, el de Andalucía o Murcía funcionan casi sin financiación, el de Canarias está en riesgo de liquidación o el de Castilla La Mancha, lleva 5 años intentando formarse pero no dejan de surgir obstáculos que impiden su formación.
Hemos de revertir la situación. Los consejos son vitales para la participación de la juventud, quitarlos porque se les “resta importancia” es restarle democracia a un sector que ya de por sí es vulnerable. La factura de está crisis no la podemos pagar los mismos que pagamos la de 2008, urge darle la vuelta a la situación. Que pague más quien más tiene y que esos recursos se puedan invertir por un modelo que apueste por la participación juvenil. Ahora con las elecciones autonómicas a la vuelta de la esquina, todas las fuerzas políticas deben de tener en su agenda política la reactivación del Consejo de la Juventud de Castilla La Mancha como una de sus principales alternativas para los jóvenes castellano manchegos. Es lo que se merecen nuestra juventud y es por lo que llevan 5 años peleando de forma incansable. Porque la juventud queremos un futuro digno, no un presente distópico.
Nota de prensa de Juventudes de Unificación Comunista de España.