El Gobierno regional de Castilla-La Mancha ha iniciado este lunes un grupo de trabajo destinado a la recuperación económica y social de las localidades afectadas por la DANA, con un enfoque particular en Letur, en la provincia de Albacete, y Mira, en Cuenca. Esta decisión se tomó durante una reunión celebrada en el Palacio de Fuensalida, donde participaron el presidente regional, Emiliano García-Page, junto a representantes de los agentes sociales, como CCOO, UGT y la patronal Cecam.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, afirmó que la prioridad del grupo de trabajo será evaluar los daños en las comunidades afectadas antes de implementar cualquier medida para mitigar el impacto, ya sea mediante ayudas del Gobierno estatal o acciones del Ejecutivo autonómico. Aunque la búsqueda de personas desaparecidas en Letur sigue siendo la principal preocupación, el trabajo en pro de la recuperación económica y social ya ha comenzado.
Franco también destacó que el Gobierno está en contacto con el Ministerio de Trabajo, dirigido por Yolanda Díaz, para informar sobre la situación en Letur y Mira. A pesar de que no se han recibido solicitudes de ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) hasta el momento, la consejera hizo hincapié en que estos siguen activos y disponibles para las empresas que los necesiten. También se mencionó la opción para los autónomos de acogerse al cese por actividad, con la expectativa de que el Gobierno apruebe nuevas medidas al respecto.
En cuanto al impacto empresarial, la consejera subrayó que tanto Letur como Mira tienen menos de mil habitantes, lo que permite un enfoque más directo y personalizado hacia los alrededor de 30 negocios en Letur y 42 en Mira que podrían haberse visto afectados. Los sectores más perjudicados incluyen el turismo en Letur y la cerámica, el textil y el transporte en Mira. Franco mencionó, además, que se ha establecido comunicación con el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, para abordar la recuperación de la actividad turística en estas dos localidades.
Patricia Ruiz, presidenta de UGT en la región, enfatizó la necesidad de ofrecer ayudas directas a las empresas para facilitar la reconstrucción de las áreas dañadas y asegurar la movilidad de sus trabajadores. Ruíz subrayó la importancia de transmitir «certidumbre» a las personas en situaciones difíciles y la necesidad de evaluar los daños en sectores cruciales como la agricultura y el turismo.
Por su parte, Paco de la Rosa, secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, abogó por una política constructiva en tiempos de crisis, resaltando que es crucial trabajar de manera unida y no caer en la antipolítica. De la Rosa expresó la necesidad de un asesoramiento legal y sindical adecuado para los trabajadores afectados y solicitó claridad al Gobierno central sobre los mecanismos de apoyo a los empresarios.
Ángel Nicolás, presidente de Cecam, se mostró solidario con las familias de las víctimas y reconoció la rápida disposición de varias empresas para ayudar en esta situación. Nicolás también propuso líneas de ayudas para empresarios afectados, buscando fortalecer la colaboración entre todos los actores implicados en la recuperación. Los agentes sociales y el Gobierno están trabajando juntos para abordar los desafíos presentes y futuros en las localidades afectadas.