La Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha en la provincia de Ciudad Real ha rendido homenaje este jueves a los casi 1.200 agentes de la Guardia Civil que prestan servicio en la zona, en el contexto del 180º aniversario del instituto armado. Este acto es un reconocimiento a la labor diaria de los agentes, que contribuyen a que la provincia se mantenga como una de las más seguras de España.
Blanca Fernández, delegada de la Junta de Comunidades, presidió la ceremonia, donde se puso de manifiesto la importancia de diferentes especialidades de la Guardia Civil, como el subsector de Tráfico y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona). Fernández valoró la labor de estos agentes, quienes están al servicio de medio millón de habitantes distribuidos en más de 20.000 kilómetros cuadrados de territorio.
Fernández destacó que la Guardia Civil es «imprescindible para vivir en paz, con seguridad, en libertad y garantizar los principios básicos de la democracia». También agradeció la «tranquilidad» que ofrecen a los ciudadanos gracias a su presencia en 98 de los 102 municipios de la provincia.
Por su parte, el coronel Juan Antonio Valle, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Ciudad Real, resaltó el compromiso inquebrantable de la Benemérita con la sociedad. Valle expresó que la labor de los guardias va más allá de la simple prevención del delito, estando presentes en momentos críticos y apoyando a las familias en situaciones difíciles, como en las emergencias causadas por la DANA en la Comunidad Valenciana, y protegiendo el entorno natural a través de grupos como el Seprona.
El coronel también mencionó que la Guardia Civil es la única fuerza policial presente en 64 de los 98 municipios donde opera, subrayando así su relevancia en los entornos rurales para garantizar la seguridad de los pueblos y de las actividades agrícolas y ganaderas.
El acto de homenaje se llevó a cabo en el Museo de la Merced de la capital provincial y contó con la presencia de otras autoridades, como el subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, David Broceño; el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares; y el presidente de la Diputación, Miguel Ángel Valverde, así como otros representantes políticos, militares y judiciales.