La Dirección General de Transportes de la Consejería de Fomento de Castilla-La Mancha ha presentado al Consejo de Gobierno la propuesta de interponer un recurso contencioso administrativo contra la nueva ordenanza del taxi en Puertollano, Ciudad Real. Esta decisión surge al considerar que la normativa local podría contradecir los preceptos establecidos por la legislación autonómica de transporte público.
En una rueda de prensa, el portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Puertollano, Casto Sánchez, informó que el recurso se presentará tras la negativa del Ayuntamiento a las alegaciones realizadas por la Dirección General de Transportes. De las diez alegaciones, solo una fue aceptada, lo que pone de manifiesto la postura del Consistorio ante las preocupaciones del Gobierno regional y la Federación del Taxi de Castilla-La Mancha, quienes argumentan que la ordenanza infringe la normativa vigente.
La Junta ha decidido solicitar judicialmente la anulación de esta ordenanza, aunque ha optado por no pedir medidas cautelares, lo que significa que la norma se mantendrá en vigor y no afectará, por el momento, al funcionamiento del servicio de taxis en la ciudad.
Sánchez recordó que el PSOE ya había anticipado la posibilidad de impugnación de esta ordenanza, señalando «defectos formales y técnicos» que no fueron subsanados debido a la «cerrazón» del equipo de gobierno local. Entre las controversias de la ordenanza se encuentran disposiciones como la determinación del uniforme de los taxistas según su género, la potestad del Ayuntamiento para establecer el número de vehículos y paradas, la obligación de comunicar previamente los desplazamientos interurbanos, y la restricción de que las licencias solo puedan ser concedidas a personas físicas.
En otro ámbito, Sánchez también se refirió a la ordenanza reguladora de terrazas y elementos auxiliares en espacios públicos de Puertollano, que será debatida en el pleno municipal. Consideró que esta normativa regularizará estructuras existentes sin ofrecer mejoras significativas, lo que refleja un escaso consenso y una preocupante falta de accesibilidad y adecuación a las necesidades de los ciudadanos.
Asimismo, el edil manifestó su frustración por la prolongación del proceso de contratación de las obras del Paseo del Bosque y su aparcamiento subterráneo, acusando al alcalde de «enredar» los trámites y de unir dos proyectos distintos en un intento por desviar la atención de su gestión. Según Sánchez, esto ha ocasionado retrasos innecesarios en el inicio de las obras, lo que podría perjudicar a los ciudadanos.
Finalmente, Sánchez concluyó que, a medida que se avanza en la maquinaria administrativa, será más difícil para el alcalde continuar con el engaño a la opinión pública tras incumplir sus promesas de eficiencia en la gestión de estos proyectos.
