La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha instado a los independentistas a «argumentar en lugar de insultar» al presidente regional, Emiliano García-Page, apuntando que de esta manera «les iría un poco mejor». Durante una rueda de prensa en la que se dieron a conocer los acuerdos del Consejo de Gobierno, Padilla lamentó que García-Page reciba ofensas por expresar puntos de vista que, según ella, nadie ha rebatido de manera fundamentada.
Padilla criticó la actitud de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) al proponer una financiación singular que, a su juicio, es «egoísta» porque busca reservar recursos exclusivos para Cataluña en detrimento de la igualdad de derechos y acceso a servicios públicos para el resto de los ciudadanos, incluyendo a los de Castilla-La Mancha. «Estamos más que legitimados para alzar la voz», reafirmó.
La portavoz afirmó que quienes carecen de argumentos recurren a los insultos y a la manipulación. En este sentido, recordó que García-Page defendió que la riqueza nacional pertenece a todos los españoles, un concepto que está respaldado por la Constitución. Padilla también manifestó su esperanza en que el actual presidente de Cataluña no engañe ni manipule a los ciudadanos, en contraste con lo que, según ella, han hecho los partidos independentistas en el pasado.
Además, Padilla se dirigió al portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, respecto a sus declaraciones sobre el oro colonial, argumentando que lo que él llama «colonialismo» es en realidad un egoísmo que no contribuye a la igualdad de derechos, que se contradice con la autodenominada ideología de izquierdas de su partido.
Al finalizar, Padilla criticó al Partido Popular (PP) de Castilla-La Mancha por su silencio ante los ataques recibidos por García-Page. Les instó a alzar la voz y pedir respeto, no sólo por su presidente, sino también por la región que representan, subrayando que el Gobierno de Page seguirá defendiendo los intereses de Castilla-La Mancha y buscando la igualdad entre todos los españoles. “No queremos más que nadie, pero tampoco menos”, concluyó.
