El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido tomar cartas en el asunto frente a la despoblación, lanzando una iniciativa que pretende valorizar el rico legado cultural y histórico de la región. José Luis Martínez Guijarro, vicepresidente de la Junta de Comunidades, ha informado sobre el plan de movilizar el patrimonio preservado en archivos y museos con el objetivo de dinamizar las zonas más deshabitadas y emprender la recuperación poblacional.
La estrategia fue anunciada en el marco de la jubilosa recepción del Códice 1046B, documento de destacada importancia histórica que narra la cesión de la fortaleza y villa de Uclés a la Orden de Santiago. Este acontecimiento tiene lugar con motivo del 850º aniversario de la cesión, y el códice estará expuesto durante tres días en el monasterio de Uclés.
La acción del Archivo Nacional, al permitir que esta joya histórica sea expuesta en Uclés, ha sido el impulso que el gobierno regional ha decidido seguir. Martínez Guijarro señaló que, siguiendo este ejemplo, la Consejería de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha pondrá en marcha una iniciativa para que tesoros similares sean exhibidos en diversas localidades, comenzando por Valverde del Júcar en el marco del séptimo centenario de la constitución del Señorío de Valverde el próximo año.
El vicepresidente ha confirmado la creación de un facsímil del Códice 1046B que permanecerá en Valverde del Júcar, proporcionando un nuevo atractivo turístico y educativo. La intención es replicar este esquema siempre que una comunidad autónoma lo solicite, aprovechando la vasta colección de artefactos bien conservados que pueblan los archivos y museos de la región.
Este enfoque pretende dar un impulso notorio al desarrollo de los municipios a través de la capitalización del patrimonio, no solo como legado histórico, sino también como motor económico y generador de oportunidades laborales. En un emplazamiento evocador como es el monasterio de Uclés, donde la despoblación constituye una amenaza real, Martínez Guijarro apeló a una cooperación reforzada entre diversas instancias administrativas para promover el desarrollo del mundo rural.
Con la vista puesta en el reto demográfico, el vicepresidente recalcó la necesidad de conjugar esfuerzos y sacar el máximo partido de los recursos disponibles, como el patrimonio cultural, vital no solo para detener el desplazamiento de habitantes de zonas amenazadas por la despoblación, sino también para revertirlo y propiciar una recuperación firme y sostenible en Castilla-La Mancha.