El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado un ambicioso plan para mejorar la «visitabilidad» y «accesibilidad» de los yacimientos arqueológicos de El Tolmo de Minateda, en Hellín, y Libisosa, en Lezuza, que contará con una inversión que supera los 984.000 euros. La información fue compartida por la viceconsejera de Cultura, Carmen Teresa Olmedo, quien destacó que estas acciones se inscriben dentro del Plan de Sostenibilidad Turística de los Parques y Yacimientos Arqueológicos de la región.
Según detalló Olmedo, el Ministerio ha asignado un total de ocho millones de euros para ser distribuidos en la red de parques y yacimientos de Castilla-La Mancha, y de esa suma, se destinarán 984.000 euros a la provincia de Albacete, específicamente a los mencionados yacimientos arqueológicos. De esta cantidad, 533.000 euros irán a El Tolmo de Minateda y cerca de 491.000 euros a Libisosa. Las intervenciones se organizarán en torno a cuatro ejes: transición verde y sostenible, eficiencia energética, transición digital y competitividad.
Las acciones previstas incluyen la instalación de escaparates agroalimentarios y artesanales, así como toldos y cubiertas vegetales en las áreas de parada durante las visitas guiadas. En el ámbito de la eficiencia energética, se contempla la instalación de placas solares para autoconsumo en Libisosa y la renovación de las placas ya existentes en El Tolmo de Minateda. También se modernizará la iluminación de ambos yacimientos y se instalarán balizas solares para permitir visitas nocturnas.
Además, se habilitarán puntos de carga para vehículos eléctricos y bicicletas, con la adquisición de diez bicicletas disponibles para los visitantes en los accesos al parque. Se creará una red de rutas que conecten ambos yacimientos mediante señalética adecuada, facilitando el acceso a monumentos históricos y naturales en la zona.
En cuanto a la transición digital, se priorizará la instalación de una red WIFI en los yacimientos, lo que no solo permitirá el funcionamiento de la videovigilancia para prevenir actos vandálicos, sino que también soportará un programa de Realidad Aumentada. Para aumentar la competitividad de estos recursos turísticos, se desarrollarán nuevos vídeos promocionales y se incorporarán pantallas digitales, además de cinco nuevas gafas de realidad virtual para cada yacimiento.
Por último, la viceconsejera enfatizó la importancia de mejorar la accesibilidad física, eliminando barreras arquitectónicas, y también la accesibilidad sensorial y cognitiva para garantizar que todos los públicos puedan disfrutar de las visitas a estos sitios históricos.
