La Junta de Castilla-La Mancha se encuentra en las etapas finales de negociación con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico para oficializar un acuerdo destinado a la construcción de 67 kilómetros de tuberías en la Llanura Manchega. Este acuerdo, que asciende a 95 millones de euros, fue anunciado por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien destacó la relevancia de este proyecto en el ámbito del agua, al comprometerse a garantizar un abastecimiento de agua de la más alta calidad para 150.000 habitantes de la región.
García-Page subrayó que esta iniciativa no solo abordará las necesidades de suministro de agua potable de los ciudadanos que residen en el Campo de Calatrava, Daimiel y Ciudad Real, sino que también contribuirá a la regeneración hídrica del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. “Es una apuesta importantísima que todo el mundo llevamos esperando desde hace mucho tiempo”, manifestó el presidente regional.
Además, García-Page indicó que el proyecto implicará una gestión integral del acceso al agua, asegurando la concesión necesaria para la ejecución de las diversas fases de esta importante infraestructura. Con este acuerdo, se espera ofrecer una solución sostenible y eficiente ante los desafíos hídricos de la zona, beneficiando tanto a la población como al medio ambiente.