La Junta Electoral Central (JEC) ha tomado una decisión inusual en su reunión del jueves pasado en el Congreso. Con las elecciones generales programadas el 23 de julio, la JEC ha anunciado que permitirá que las personas que hayan contratado vacaciones antes del 30 de mayo puedan evitar la formación de una mesa electoral si pueden demostrar que su cancelación provocaría un «perjuicio económico o trastorno grave». Esta medida solo se aplicará si se garantiza que la mesa electoral sigue funcionando correctamente en ausencia del miembro designado.
La JEC ha añadido que cualquier persona que quiera evitar convertirse en miembro de una mesa electoral debe demostrar su «perjuicio económico o trastorno grave» con documentos acreditativos. La Junta Electoral de Zona también debe garantizar que la mesa electoral sigue siendo plenamente integrada, asegurando que los trabajadores electorales puedan cumplir con sus obligaciones el día de las elecciones.
Esta medida es una respuesta a la celebración de las elecciones en un período vacacional. La JEC ha dejado claro que solo se aplica a aquellos que contrataron sus vacaciones antes de la fecha de convocatoria de las elecciones. En adelante, los ciudadanos no podrán utilizar esta cláusula si reservan vacaciones después de la publicación de las elecciones.
