La fiesta de la Pandorga es una de las celebraciones más populares de Ciudad Real, y ayer medio centenar de niños tuvieron la oportunidad de conocerla y participar en actividades relacionadas con ella.
La jornada empezó con una limoná, actividad en la que los pequeños aprendieron a hacer su propia limonada. Este gesto forma parte de la tradición de la Pandorga, ya que los participantes llevan una limonada para refrescarse durante la fiesta.
Otra de las actividades fue la ofrenda a la Virgen del Prado, patrona de la ciudad. Los niños pudieron aprender sobre la importancia de este acto y participar en él, llevando flores y rezando ante la imagen de la Virgen.
También hubo tiempo para correr los toros de fuego, una actividad emblemática de la fiesta de la Pandorga. Los niños pudieron experimentar la emoción de correr junto a los toros de fuego, siempre bajo las medidas de seguridad adecuadas.
Por último, la Asociación de Coros y Danzas María José Melero enseñó a los pequeños a bailar la Seguidilla Manchega, una danza tradicional de la región. Esta actividad tiene como objetivo preservar el folclore y transmitirlo a las nuevas generaciones.
El Pandorgo 2015, Francisco José Turrillo, destacó la importancia de que los más pequeños conozcan su fiesta y sus tradiciones. Para ello, explicó a los participantes el significado de la ofrenda a la Virgen del Prado y la importancia de hacer una buena limonada.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Coros y Danzas María José Melero, Mª José Melero, resaltó la relación entre la fiesta de la Pandorga y el folclore. Además de enseñar a bailar la Seguidilla Manchega, hizo hincapié en la importancia de transmitir el amor por el folclore a las nuevas generaciones.
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, y el concejal de Servicios a la Ciudad, Gregorio Enrique Oraá, estuvieron presentes en estas actividades infantiles. Ambos destacaron la importancia de fomentar el conocimiento de las tradiciones entre los más jóvenes y la relevancia de la fiesta de la Pandorga en la ciudad.
En definitiva, esta actividad histórica permitió a medio centenar de niños de Ciudad Real conocer la esencia de la fiesta de la Pandorga y participar en actividades emblemáticas de esta celebración. Con ello, se busca que las nuevas generaciones mantengan viva esta tradición y disfruten de una de las fiestas más reconocidas de la ciudad.