En un giro inesperado y controvertido durante el debate final de «Supervivientes 2025», la ausencia de Montoya se convirtió en el foco de una polémica que sacudió tanto al plató de Telecinco como a las redes sociales. La expectativa por su aparición se esfumó cuando el presentador Carlos Sobera reveló la causa detrás de su no comparecencia: una recomendación médica advirtiendo que Montoya no se encontraba en condiciones óptimas para participar.
Este anuncio no sólo sorprendió a la audiencia, sino que también provocó la reacción del diseñador Pelayo Díaz, quien desde el estudio no tardó en lanzar un comentario ácido hacia su ausente compañero. «Si Montoya tiene que decirme algo, que venga y me lo diga, que yo sí estoy en mi lugar de trabajo», manifestó Díaz, insinuando una evasión intencionada por parte de Montoya hacia los últimos coletazos del debate mediático que envuelve al programa.
La última vez que Montoya fue visto en público en un contexto relacionado con «Supervivientes 2025» fue hace apenas tres días, durante otro coloquio acalorado que terminó en un espectáculo de emociones volátiles por su turbulenta historia con Anita Williams, teñido de gritos, llantos y una abrupta salida del plató. Esta incómoda situación previa añadió capas de complejidad a su repentina desaparición de la escena mediática, alimentando especulaciones sobre el verdadero motivo detrás de su ausencia.
La organización del programa, buscando calmar las agitadas aguas, compartió a través de Twitter un mensaje de apoyo hacia Montoya, deseándole «un abrazo y una pronta recuperación», reafirmando la versión oficial detrás de su no participación. Sin embargo, el silencio de Montoya post-debate y su cese de comunicación con varios de sus compañeros, incluidos nombres como Terelu Campos y Carmen Alcayde, han dejado un halo de misterio y especulación sobre su estado actual y sus relaciones dentro del círculo de «Supervivientes».
Carmen Alcayde, por su parte, defendió a Montoya ante las críticas, apuntando que su ausencia se debía a recomendaciones médicas legítimas que sugerían un descanso y una desconexión de las tensiones televisivas. Este gesto de Alcayde pone en relieve las tensiones internas que este reality show ha generado entre los participantes, con alianzas y enemistades que trascienden la pantalla.
Mientras tanto, el público y los seguidores del programa quedan pendientes de más detalles y esperan una eventual explicación de Montoya, quien hasta ahora ha decidido mantener un perfil bajo, dejando que el tiempo y, tal vez, futuras apariciones, despejen las dudas sobre su inesperada y polémica retirada del último debate de «Supervivientes 2025».