La Dirección General de la Guardia Civil ha enviado una carta al Ayuntamiento de Toledo notificando su intención de iniciar el procedimiento para la reversión de los terrenos de La Peraleda, que habían sido recepcionados para la construcción de un nuevo cuartel de la Benemérita. Esta comunicación se produce tras la aprobación en el pleno municipal, el pasado 24 de mayo, de una solicitud al Gobierno para obtener información sobre el estado actual del proyecto y los plazos de ejecución previstos.
El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, había previamente enviado una carta el pasado 23 de agosto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, así como a otros organismos pertinentes, con el propósito de conocer el estado del proyecto del cuartel. La respuesta de la Dirección General parecía ser una contestación a dicho requerimiento que solicitaba la reversión de los terrenos a favor del Ayuntamiento en caso de que el cuartel no se construyera.
En el marco de una visita a un centro médico con motivo del aniversario de un programa dedicado a la salud de la mujer, Velázquez afirmó que los problemas técnicos señalados por la Comandancia de la Guardia Civil hacen que la construcción del cuartel en La Peraleda sea inviable. Por ello, el alcalde planea enviar una carta para solicitar una reunión con la Dirección General de la Guardia Civil, buscando concretar una fecha lo más próxima posible, con el objetivo de analizar alternativas viables para la edificación del cuartel.
Carlos Velázquez destacó que existen distintas alternativas ya consideradas, entre ellas, la ubicación en un polígono industrial cercano al hospital, donde se cuentan con dos parcelas, una propiedad del Ayuntamiento y otra de la Junta. Aunque esta opción parece ser la más adecuada según las necesidades técnicas expuestas por la Guardia Civil, el alcalde subrayó que no se descartan otras posibilidades que puedan resultar convenientes.
El futuro de La Peraleda se plantea con cierta incertidumbre, habida cuenta de los problemas que han surgido, incluida la cuestión de las terrazas y su actual uso como espacio ferial. Según Velázquez, la limitación en el uso de más de 30.000 metros cuadrados ha restringido la actividad en esa área. Sin embargo, si el procedimiento de reversión se lleva a cabo con la celeridad anunciada, el alcalde confía en que La Peraleda podrá ser utilizada plenamente por los ciudadanos toledanos en un futuro cercano.