La Guardia Civil de Tráfico de Castilla-La Mancha ha decidido poner en marcha un nuevo plan de choque, cuya misión será la de disminuir la siniestralidad grave en las carreteras de la región. Para llevar a cabo esta iniciativa, la entidad coordinará acciones conjuntas con las cinco jefaturas provinciales que conforman la comunidad autónoma.
Este plan ha surgido como resultado de una reunión de trabajo y coordinación celebrada en Los Yébenes (Toledo), presidida por el teniente coronel Jefe del Sector de Tráfico de Castilla-La Mancha y con la participación del jefe provincial de Tráfico de Madrid, en su papel de coordinador de la Zona Centro. A este encuentro también asistieron los jefes provinciales de tráfico pertenecientes a Castilla-La Mancha, así como los jefes de Subsector de cada una de dichas provincias.
El análisis de las estadísticas de siniestralidad vial durante el primer cuatrimestre de 2024 fue el centro de la discusión. A pesar de que a nivel estatal se observa un aumento en los accidentes, Castilla-La Mancha ha registrado una bajada en la siniestralidad grave, ubicándose por debajo de la media a nivel nacional. Este dato fue destacado por la Guardia Civil a través de un comunicado de prensa.
En la asamblea se examinaron en detenimiento diversos aspectos, en particular la siniestralidad en función del tipo de vehículo involucrado. Se ha informado de un crecimiento en incidencias con motocicletas, ciclomotores y autobuses. Asimismo, se señala un incremento en los accidentes causados por salidas de vía, mientras que se registra una disminución en las colisiones.
Una nota alarmante recalcada por la Guardia Civil es el aumento de siniestros viales relacionados con la velocidad, que ha sido identificada como un factor determinante en el 53,85% de los casos de fallecimientos en estos eventos, tanto en carreteras desdobladas como en las convencionales. Con estas cifras en mano, la nueva estrategia de la Guardia Civil buscará abordar este desafío clave para mejorar la seguridad vial en la región.
