La Guardia Civil de la Comandancia de Guadalajara ha logrado desarticular un peligroso grupo criminal dedicado al robo en establecimientos de hostelería en las provincias de Madrid y Guadalajara. Los tres integrantes de esta banda han sido arrestados en el marco de la operación ‘Sagalin’, tras una exhaustiva investigación que ha durado varias semanas.
En los últimos meses, se habían producido una serie de robos con fuerza en diversos establecimientos de la provincia de Guadalajara. Los presuntos delincuentes causaban grandes destrozos para acceder a los locales, utilizando una «eslinga» amarrada a las puertas y un vehículo previamente sustraído para tirar violentamente y lograr entrar. Una vez dentro, empleaban mazas o una tapa de alcantarilla para golpear y dañar las máquinas tragaperras, apoderándose de la recaudación y escapando rápidamente.
Durante la investigación, se descubrió que un vehículo había sido utilizado en varios de los robos, y gracias a las cámaras de videovigilancia instaladas en las poblaciones, pudo ser identificado. A través de un minucioso estudio de las matrículas de los vehículos implicados y de los indicios recopilados en los lugares de los delitos, se logró identificar a los tres individuos de origen rumano involucrados en esta actividad delictiva, todos ellos con extensos antecedentes policiales por los mismos hechos.
La Guardia Civil procedió a la detención de los sospechosos, quienes ahora enfrentan cargos por pertenencia a grupo criminal, simulación de delito, robo o hurto de vehículo a motor y robo con fuerza en las cosas. Las pruebas y los detenidos fueron entregados al juzgado correspondiente encargado de la investigación.
La operación ‘Sagalin’ ha sido llevada a cabo por agentes del Equipo de la Policía Judicial del Puesto Principal de la Guardia Civil de Azuqueca de Henares, en colaboración con el Equipo Roca de la Comandancia de Guadalajara. Gracias a la minuciosidad y el trabajo conjunto de ambos equipos, se ha logrado poner fin a las actividades delictivas de este grupo criminal, brindando seguridad y tranquilidad a los propietarios de los establecimientos afectados.
Esta operación demuestra una vez más la importancia de la colaboración ciudadana, la utilización de sistemas de videovigilancia y la perseverancia de las fuerzas de seguridad en la lucha contra el crimen. La Guardia Civil continúa trabajando incansablemente para garantizar la seguridad y el bienestar de la sociedad, y esta exitosa operación es un claro ejemplo de su compromiso y eficacia en la lucha contra la delincuencia.
