El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha tomado una decisión relevante para el ámbito académico en la región al aprobar este martes la gratuidad de la primera matrícula en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y en la Universidad de Alcalá (UAH) a partir del próximo curso. Esta medida, según ha afirmado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, beneficiará a cerca de 5.100 estudiantes en el curso 2025/2026.
Durante una rueda de prensa que ofreció junto al rector de la UCLM, Julián Garde, y el vicerrector de la UAH, Jorge Pérez, Pastor destacó que la gratificación de la matrícula era un «compromiso» del Gobierno regional en su firme intención de apoyar una universidad «pública y de calidad». Esta acción supondrá un gasto cercano a los cinco millones de euros, que se destinarán a ambas universidades mediante una adenda a sus contratos programa para el periodo 2022-2026. De esta cantidad, 4,4 millones de euros serán asignados a la UCLM, mientras que aproximadamente 600.000 euros irán a parar a la Universidad de Alcalá.
La gratuidad se aplicará únicamente a los créditos matriculados por primera vez, con un límite de 60 créditos para los estudios de grado y de hasta 72 créditos para aquellos de doble grado.
El consejero también ha delineado los principales supuestos para acceder a esta ayuda. En el primer escenario, los alumnos de nuevo ingreso que inicien su primer curso podrán beneficiarse siempre que provengan de cualquier modalidad de Bachillerato, siempre que hayan superado la PAU o EvAU en centros de Castilla-La Mancha. También se contempla a quienes acceden a través de las pruebas de acceso para mayores de 25, 40 (con experiencia laboral) y 45 años, así como a quienes provienen de ciclos formativos que permitan acceder a la universidad.
Un requisito esencial será acreditar que se ha solicitado previamente la ayuda del Ministerio de Educación; cabe destacar que ambas ayudas no son compatibles, por lo que si un alumno no recibe apoyo del Ministerio, podrá acceder al de la Comunidad Autónoma. El segundo supuesto contempla a aquellos estudiantes que ya han comenzado estudios fuera de la región y desean trasladarse a las universidades en Castilla-La Mancha, aunque deberán cumplir con el mismo requisito de solicitar la ayuda ministerial y acreditar que han superado al menos el 65% de los créditos en el curso anterior. Los alumnos de universidades privadas no podrán solicitar esta subvención.
Con el fin de atender situaciones especiales, como estudiantes en el extranjero o aquellos que han tenido que salir de la región por razones imprevistas, se creará una comisión mixta que evaluará caso por caso si son elegibles para recibir la ayuda.
Amador Pastor ha calificado la iniciativa como «una apuesta clara por la universidad pública y de calidad», reiterando el compromiso del Gobierno con políticas que fomenten el «bienestar y la igualdad de oportunidades». En la misma línea, Julián Garde ha valorado esta medida, señalando que permitirá que nadie se quede fuera de la universidad por motivos económicos y que asegura la retención del talento estudiantil en la región.
Por su parte, Jorge Pérez ha descrito la iniciativa como «fantástica», destacando que ayudará a limitar la pérdida de estudiantes y a atraer a aquellos que dudan entre quedarse o marcharse. También ha subrayado que podría movilizar a personas que previamente decidieron no acceder a estudios universitarios, considerándola como una «muy buena ocasión» para retomar su interés por la educación superior.